Películas de estreno, películas antiguas, películas clásicas, películas bodriosas, películas de todo tipo, comentadas por el arte inefable del General Gato.
11 años de Cine 9009 en línea.
El próximo 19 de febrero de 2017, Cine 9009 cumplirá once años en línea. Sí, jodíos, cuéntenlos, once en total desde su inauguración en el ya lejano 2006. Y para celebrar, estamos embarcados en una minimaratón de posteos. De manera que entre el domingo 12 y el domingo 19 del febrero que ya mencionamos, habrá un posteo nuevo con una peli nueva cada día, en donde aprovecharemos de repasar algunas que vimos en el cine, y que por un motivo u otro no acabaron publicadas en su día. Y a no quejarse de que llegó demasiado tarde, que ya no las podemos ver en el cine y otras cosas. También está el cable, el streaming, los DVDs para los cuatro gatos que todavía los compran, y... er... well... medios menos legales para conseguírselas. Además, si fuera por eso, no habría posteado pelis de cine mudo que se estrenaron hace sus buenos 90 o 100 años atrás. De manera que... disfruten, y saludos para todo el mundo (eeeeeexcepto para ese perejil de allá... sí, tú, a tí te hablo... el de la IP chistosa... te reconozco, eres el imbécil que no apagó el smartphone el otro día en el cine. Cretino. Pero para el resto, saludos).
jueves, 5 de junio de 2014
"El hombre de la máscara de hierro" (1998).
-- "The Man in the Iron Mask". Estados Unidos / Francia. Año 1998.
-- Dirección: Randall Wallace.
-- Actuación: Leonardo DiCaprio, Jeremy Irons, John Malkovich, Gérard Depardieu, Gabriel Byrne, Anne Parillaud, Judith Godrèche, Edward Atterton, Peter Sarsgaard, Hugh Laurie, David Lowe, Brigitte Boucher, Matthew Jocelyn, Karine Belly, Emmanuel Guttierez.
-- Guión: Randall Wallace, basado en la novela de Alejandro Dumas padre.
-- Banda Sonora: Nick Glennie-Smith.
-- "El hombre de la máscara de hierro" en IMDb.
-- "El hombre de la máscara de hierro" en la Wikipedia en inglés.
¿DE QUÉ SE TRATA?
En 1789, manadas de sediciosos decidieron que eso de obedecer al rey no iba con ellos, y se tomaron... ¡¡¡LA BASTILLA!!! (sorry, folks, nada de imágenes, sólo voz en off). Adentro encontraron el registro de un prisionero que... chachán... ¡¡¡USABA UNA MÁSCARA DE HIERRO!!! Esta es su historia. O la que nos gustaría que fuera su historia, porque la historia verdadera de verdá es más bien prosaica (¿que cómo lo sé? ¡Porque soy un gato y tengo antepasados gatos! ¡Por eso, joer!). Pero no importa. 1660yalgos. Luis XIV gobierna en Francia como corresponde: con mano dura, dejando que el pueblo se muera de hambre, viviendo su vida principesca en Versalles (sólo le falta un think tank y ya estaríamos eligiéndolo Presidente). El pueblo se rebela porque todo el dinero se va en pagar soldados y guerras, y el rey en respuesta, ante la sugerencia de un cortesano, ordena repartir comida demasiado podrida para mandársela a los militares (¿en dónde he escuchado eso antes?). Y cuando el pueblo se rebela otra vez porque, verán, a ellos eso de comida con gusto a fermento y hongos y con amenaza de enfermedades estomacales como que no le va, el rey manda ejecutar al consejero que aconsejó repartir comida podrida. El caso es que en medio de todo esto, tenemos a los CUATRO MOSQUETEROS (sí, joer, cuéntenlos, eran cuatro a pesar del título: Portos, Athos, Aramis... y Dartañán). Que ahora son uno, porque sólo D'Artagnan continúa en servicio, y el resto anda porái. Y Luisito, muy Leo DiCaprio él, ¿qué hace? ¿Festejarlos, regalonearlos, tratarlos como se debe para que no se le metan ideas en la cabeza? Nops... Con D'Artagnan sigue portándose bien, pero no esconde que toma medidas estúpidas y da órdenes crueles, y a la decencia de D'Artagnan, eso como que le subleva un poco (no demasiado, de todos modos, hay un sueldo que mantener, además FRANCIA ÜBER ALLES...). A Athos, le echa el ojo a la futura nuera y envía al hijo al campo de batalla para que se muera de un festivo cañonazo, lo que efectivamente sucede, y ya tenemos a Athos complotando. A Aramis, jesuita él, lo pone a perseguir al jefe de los jesuitas. Aunque el jefe de los jesuitas hubiera terminado resultando quién termina resultando (sin spoilers, pero joer, no es tan difícil adivinar tampoco), es bastante estúpido pedirle a uno de los suyos que traicione a su jefe a cambio de nada. Y a Porthos... a Porthos... bueno, a Porthos en realidad no le hace nada, pero el hombre es un borrachín al que le van las tetonas, y por el amor a una buena pelea... Por lo tanto, los mosqueteros deciden que la cosa ya ha llegado a un colmo, que alguien tiene que hacer algo... y Aramis hace una revelación. Hace muchos años atrás, dejó encerrado a un hombre en un castillo. Un hombre con una máscara de hierro. Un hombre que, después de ser desmascarado-deshierrado, puede ser puesto en lugar de Luis XIV. Confiando en que no se vuelva tan tirano (y sobre todo tan estúpido) como el anterior, claro. La batalla por la salvación de Francia ha comenzado.
EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.
Luis XIV. La grandeur de la France. L'Etat c'est moi. Nadie pone en duda que el reinado de Luis XIV fue uno de los más importantes y significativos en la historia de Francia. Ahora bien, ¿de los mejores...? Buenoooooo... Nos legó Versalles. La Academia de Ciencias. Medidas progresistas en relación a las comunicaciones, los transportes, la marina... Por otra parte, libró un incesante ciclo de guerras que remató en la dantesca Guerra de Sucesión Española (una guerra paneuropea antes de las Guerras Napoleónicas o la Primera Guerra Mundial), y básicamente mantuvo a raya la explosión demográfica por el expediente de dejar que sus súbditos se murieran de hambre. Material de oro para un escritor como Alejandro Dumas... el que sin embargo, no era del tipo "voy a escribir un monumental tratado histórico que será ignorado cien años después de que me muera", sino más bien del tipo "voy a saltarme la historia a la torera y hacer el Dan Brown y escribir lo que se me sale de los santos cojones". El resultado fue una novela llamada "Los tres mosqueteros", en donde refiere las peripecias de los susodichos CUATRO MOSQUETEROS (aunque a D'Artagnan lo hacen mosquetero AL FINAL de la novela), y que tuvo tanto éxito, que engendró una secuela llamada "Veinte años después". Y como la nigocia is la nigocia, quiridi, engendró otro folletín más, "El vizconde de Bragelonne", que, señoras y señores... refiere tres aventuras de los mosqueteros CADA UNA DE LAS CUALES ES TAN LARGA COMO LA NOVELA ORIGINAL. Que este tipo alarga las cosas más que los guionistas de "Dexter". En fin, resulta que la última de las tres aventuras, ÉSA SÍ que es la de la máscara de hierro. Que ha sido objeto de varias adaptaciones, incluyendo una con Richard Chamberlain (créanlo o no), "El hombre de la máscara de hierro" de 1977. ¿Quién fue el hombre de la máscara de hierro? Nadie lo sabe con seguridad. Hay teorías, pero nada oficialmente comprobado. Alejandro Dumas se colgó alegremente a la teoría de que dicho hombre era el hermano gemelo de Luis XIV, y que no recurrieron al expediente macedónico de asesinarlo apenas Luis llegó al trono porque, verán... era de sangre real. Como en "El regreso del Rey", que a los orcos se los cargan a paladas, pero a Saruman noooooo porque él es un maaaaaagoooooo y por lo tanto más importante y etcétera. O como en ciertas dictaduras militares que los matones caen como moscas a la cárcel después, y los jerifaltes supremos mueren contentos en sus camas. Hay tradiciones que no pueden obviarse, leñe. El caso es que en 1998, un tal Randall Wallace (tipo que por lo demás no se ha prodigado demasiado en el cine, quizás debido al fiasco de "Fuimos soldados" con Mel Gibson en 2002) decidió que su opera prima sería una adaptación de la historia del hombre de la máscara de hierro (decisión apropiada para alguien cuyo gran crédito anterior fue, abrir boca en gesto de asombro aquí, guionista de "Corazón valiente"). La jugada salió excelente. La peli se llevó un piñazo con la crítica, pero en donde importa, la taquilla, se cocinó unos bonitos 180 millones con un presupuesto de apenas 35 millones, en una época en donde el presupuesto promedio de las pelis oscilaba en el rango 70-150 millones. Ayudado claro porque el prota era Leonardo DiCaprio en su primer rol post-"Titanic", porque las encuestas revelaron que la peli fue inesperadamente popular entre las jovencitas de sexo hémbrico sub-25 (lo que debe explicar seguramente el olor a efluvio de mujer que había en el cine después de cada función).
¿POR QUÉ VERLA?
-- Aunque recibida con pésimas críticas en su día, la verdad es que "El hombre de la máscara de hierro" es una muy aceptable peli de aventuras. Bastante darkier and edgier para los estándares de la época (la idea de los tres mosqueteros era la demasiado sanitizada "Los tres mosqueteros" de la Disney de 1993), ya que hay PERSONAJES QUE MUEREN, y además los protas no son mijos heroicos ni mucho menos, sino un puñado de vejetes crepusculares emprendiendo la que probablemente sea su última gran campaña por la justicia, los valores mosquetíricos y la Francia. Se agradece que en la peli, los protas son presentados más como antihéroes dedicados a las delicias carnales o soltando algún alegre diálogo con caquita de por medio, que la imagen demasiado idealizada que otras pelis nos han proporcionado de los personajes (lean ustedes los textos originales de Alejandro Dumas y llévense una sorpresa... ¡en las novelas originales, los mosqueteros son un puñado de perdedores antihéroes cuyo único heroísmo consiste en mantenerse más o menos vivos e intactos de página a página!). Curiosamente para una peli "de mosqueteros", esta peli tiene relativamente poca acción, y prefiere centrarse más bien en el desarrollo personal de... los personajes, valga la redundancia, lo que le confiere un espesor poco corriente en estas pelis cuyos protas por lo general suelen ser más estereotipos que hombres. En cuanto a la realización misma, no diremos que es débil (no lo es), pero tampoco nadie va a acusar a su director de ser original o un genio artístico. Es obvio que confió ante todo en la fortaleza de un buen guión (que fiel a la doctrina dumasiana, en ningún minuto deja que la fastidiosa realidad histórica se interponga en su camino de contar una historia entretenida), y en sus actores. Que por su parte, están bastante bien. El de mayor cartel es claramente Leonardo DiCaprio, y si bien no es descollante ni materia de Oscar (aunque, bueno, considerando que el Oscar, a veces...), sí cumple con eficiencia al caracterizar a los dos gemelos, el bueno y el malvado. Gabriel Byrne es un correcto D'Artagnan que lleva con mucha dignidad el peso dramático de su personaje dividido entre varias lealtades, mientras que Jeremy Irons y John Malkovich como los otros mosqueteros están muy bien, aunque el que descuella por supuesto es Gérard Depardieu, probablemente ayudado porque es el único de los cuatro mosqueteros que de verdad es francés (la otra francesa es Judith Godrèche, que está bien sin superlativos, y Anne Parillaud como la madre de Luis XIV, demasiado joven para el rol pero justificado para darle un puntillo sexy... y siendo una actriz francesa interpretando a Ana de Austria que no era austríaca sino española. Y no, yo tampoco entiendo ese casting). En definitiva, si bien la peli se aparta en varios respectos tanto del material dumasiano original como de la realidad histórica, claro está, lo hace en beneficio de construir una buena peli de aventuras, una que se preocupa por sus personajes, y una en donde la lucha que se emprende tiene más significación que la corriente "héroes contra villanos". Una peli de los '90s que se merece un mejor lugar en la historia del cine del que actualmente tiene.
IDEAL PARA: Ver una correcta peli de aventuras con espadachines, con más garra que el promedio de las mismas.
VIDEOS.
-- Trailer de la peli [en inglés, sin subtítulos].
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