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jueves, 6 de noviembre de 2008

"Los falsificadores" (2007)


-- "Die Fälscher" (título original austríaco), "The Counterfeiters" (título en inglés para distribución internacional). Alemania / Austria. Año 2007.
-- Dirección: Stefan Ruzowitsky.
-- Actuación: Karl Markovics, August Diehl, Devid Striesow, Martin Brambach, August Zirner, Veit Stübner, Sebastian Urzendowsky, Andreas Schmidt, Tilo Prückner, Lenn Kudrjawizki, Norman Stoffregen, Bernd Raucamp, Gode Benedix, Oliver Kanter, Dirk Prinz.
-- Guión: Stefan Ruzowitsky, basado en el libro de memorias de Adolf Burger.
-- Banda Sonora: Marius Ruhland.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Alemania, 1936. Después de una breve secuencia introductoria que no nos informa de demasiado y en realidad es un tanto gratuito ponerla aquí (aunque nadie niega que Dolores Chaplin se ve de lo mejor con enaguas de encaje), descubrimos la existencia de un judío que se gana la vida, pues bien, es darwiniano nuestro hombre, y se adapta, ganando dinero a costa de sus compinches judíos, oficiando de usurero, y además falsificando el dinero, eso es ser maldito y no el andar vendiendo mesíases varios a las autoridades romanas. Sucede que la policía nazi no sólo se dedica a perseguir Untermenschen, sino que además a los falsificadores, y nuestro estimado es agarrado con las manos en la masa (no, no sobre las planchas de falsificación, sino sobre una contundente ciudadana). ¡Al campo! Ya saben a qué campo, por supuesto. Pasan cinco años de estar en las canutas, siempre con el riesgo encima de que te manden a gaseado gratuito, hasta que de pronto su antiguo perseguidor lo encuentra y decide cambiar su suerte. Here's the deal: Salvo tu judío trasero y te doy algo parecido a un nivel de vida humano, y a cambio tú me falsificas la libra esterlina, para así... ¡¡¡HUNDIR EN UNA ESPANTOSA INFLACIÓN A TODA LA ECONOMÍA BRITÁNICA, BUAHAHAHAHÁ, QUE ASQUEROSAMENTE MALVADOS SOMOS, MUAHAHAHAHAHÁ!!! Pero a veces ser demasiado bueno en lo que haces significa que te echarán encima más pega y por el mismo salario. Porque para seguir manteniéndose en la línea de flotación, el desafío después de la libra será peor: falsificar el dólar... ¿Conseguirán nuestros heroicos judíos plantarle cara al destino y a la adversidad, y sobrevivir en medio de la orgía nazi? ¿Serán tan heroicos para detenerse y sacrificarse por el bien de las economías del mundo libre...?

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Por suerte ya están pasando los tiempos en que las pelis de nazis dividían al mundo en nazis malos malísimos y judíos estoicos y bonachones aguantándolo todo porque ellos son el reservorio de la esperanza humana, la sal de la tierra, y etcétera. Desde "La caída", que pintaba un retrato un poco más humano de Hitler, que las pelis sobre nazis de caricatura estilo "Top Secret" no son muy presentables que digamos. Durante toda la segunda mitad del siglo XX, los bienpensantes podían sentirse bien satanizando a los nazis porque después de todo, si les despojaban de cualquier cosa que pudiera recordarles a la condición humana, entonces el resto de la parroquia podía sentirse muy bueno y muy chulo, porque podrán tratar a patadas al perro y ser unos malparidos como jefes en el trabajo, pero no somos maloh, no señóh, porque después de todo esos malvados nazis eran todavía más malos. Además, era una buena manera de congraciarse con la comunidad judía (se diga lo que se diga, el lobby judío en Hollywood sigue siendo poderoso, y si no, díganselo a Steven Spielberg). Por supuesto esto no quiere decir, como clama la beatería pseudoliberal rasgando vestiduras (muy judío esto, por cierto), que esta humanización de los nazis signifique darles perdón y olvido, y carpetazo al asunto y a otra cosa que la vida es bella para quedarse con eso. Pero poner a los judíos de buenos siempre y en todo lugar, en el fondo implica mantener la ilusión de que hay seres humanos bendecidos por la Ley de Dios, y otros que caminan en las tinieblas y la oscuridad porque no se reconocen inferiores (¿según quién?), y esto es pura filosofía nazi, justamente. Hay judíos buenos, y también ha habido judíos malos. En las "Memorias" del judío por familia Isaac Asimov, sin ir demasiado lejos, refiere éste como en un debate televisivo le enrostraron que, por favor señor Asimov, dígame cuándo los judíos habían sido malvados teniendo el poder, y Asimov contestó que cuando los Macabeos conquistaron Samaria, impusieron la conversión forzosa a todos los samaritanos, a lo que le contestaron que fue la única vez, y Asimov repuso que sí, pero que era la única vez que habían tenido los judíos el poder, y una de una no estaba mal... (Bueno, podría haber sumado los progroms organizados por los judíos contra los asentamientos palestinos desde 1948). Es parte de la condición de ustedes, humanitos, que quién tiene el poder, tiene la tendencia a abusar del mismo, sin distinción de raza, sexo, estirpe o condición. Un tipo de cine en que siempre los judíos son "los buenos", o simplemente que siempre tengan una estatura moral superior a sus perseguidores, es sencillamente irreal. Y más tarde o más temprano tenía que venir cine revisionista en ese sentido. Es notable el hecho de que esta peli haya sido hecha y rodada en Austria, porque en Estados Unidos, con meapilas como Spielberg, esta peli no habría obtenido financiamiento jamás. Por cierto, ganó el Premio de la Academia a la Mejor Película Extranjera (es la racha germanoparlante, primero "La vida de los otros" y ahora "Los falsificadores"...), lo que plantea el misterio de ¿cómo se la habrán colado a los votantes de la Academia...?

¿POR QUÉ VERLA?

-- A pesar de su título (por una vez en la vida más o menos bien traducido), esta peli no va de falsificación de moneda ni de nazis vs. judíos. O por lo menos, no principalmente. Esta peli se refiere fundamentalmente al viejo problema del "resiste o sirve". Si un poder irresistible se te arroja encima y no te deja opción, ¿qué tan ético es permitirse colaborar con dicho poder, aunque sea injusto? ¿Hasta qué punto se puede pedir nobleza y heroísmo? ¿Es realmente tan condenable querer sobrevivir, aún a costa de rendirse y colaborar con un poder tiránico? En la peli, el grupo de falsificadores recibe un trato que es bastante malo, pero sigue siendo aceptable como alternativa a la vida en los campos de concentración. Comida mediocre, trabajo y ducha semanal por un lado, contra la posibilidad de acabar oliendo una dosis de Zyklon-B, después de pasar por Parque Mengele. Pero eso también tiene un precio. Porque los colaboradores, en un cierto sentido, no son ni de aquí ni de allá, despreciados por aquellos a quienes tan devotamente sirven por un lado, y odiados por sus antiguos camaradas a quienes han traicionado y vuelto la espalda porque han renunciado a sus ideales y en vez de pagar criminalmente por ello, son recompensados. Esta es así una estupenda peli sobre la psicología del colaboracionismo. El prota mismo es un tipo sin muchos ideales, un superviviente que se dedicó a falsificador porque tenía el talento y podía utilizarlo para medrar, y ahora puede sacarle provecho para sobrevivir, pero no llega a ser tan rata que traicione a su grupo de trabajo si fuera el caso. A su lado hay un rebelde que quiere andar de mártir por la vida, y se niega a colaborar con los nazis casi por principio, aunque eso signifique no sólo su propia ruina, sino también la de todo el grupo de colaboradores (bonita manera de ser solidario ésta, amar a la Humanidad y olvidarse de los seres humanos que la componen). Hay también un vejete que lo único que espera de la vida es aferrarse a esta oportunidad de vivir, y que está dispuesto a todo para ello, incluso a la traición, porque quiere vivir y no va a joderse la vida porque otro quiere dárselas de Mártir de la Raza (o la clase social, o lo que sea). Todas ellas actitudes nada heroicas, bien miradas, pero sí muy humanas. Alrededor pupulan otros personajes judíos que se mantienen en un delicado equilibrio. Los nazis, por su parte, también están divididos entre los brutos que se darían el gustito de liquidar a uno o dos judíos por noche como gimnasia antes de la cena, y los que no están demasiado convencidos de la ideología nazi pero medran aprovechando el sistema y tomando lo que les conviene, incluyendo a judíos con habilidades para usarlos en trabajos especiales. O sea, entre quienes se aprovechan de los colaboracionistas para sobrevivir y ascender, y quienes de una no creen en la colaboración de los Untermenschen. Todo esto la peli lo grafica notablemente bien (el contrapunto de esto es que la peli con su ambiente carcelario es bastante densa y se hace larga: dura hora y media y pareciera que dura dos. Pero en fin, es el precio a pagar por un buen filme).

-- La peli es notable por su concisión narrativa. Salvando algunas escenas fuera del campo de concentración, casi todo transcurre en el sector de confinamiento para el grupo de falsificadores. No hay molestos flashbacks ni escenas de ensueño mostrándonos los deseos de libertad y tratando de chantajearnos emocionalmente, Hollywood-style. No hay tampoco escenas de crueldad gratuitas (hay crueldad, sí, pero está bien inserta en el guión). Lejos de la interpretación estoica común a tantas pelis de campos de concentración, en que vemos a judíos de nobleza suprema mirando hacia lo alto y lanzando frasecitas para el bronce sobre cómo hay un futuro, un mañana, una esperanza, etcétera, los actores interpretan muy bien ese sentimiento de impotencia y de nervios a punto de estallar, de sentirse bien si consiguen apenas levantarse de la cama un día más. Tampoco la peli tiene una resolución que pudiéramos calificarla de poética o bigger than life. La historia está contada de un modo austero, casi espartano, y con esta desnudez narrativa consigue aún más fuerza que con todo el almibarado hollywoodense de rigor.

-- Secuencias notables. El jefe nazi sintiéndose muy benevolente porque le hace un regalito a los presos (no diré cuál). Los prisioneros escuchando tiros al otro lado del muro. La ultratonta y pindy esposa del jefe del campo de concentración diciendo una serie de tonterías creyéndose muy informada de todo (desgraciadamente sí hay chicas así en este mundo...). La humillación suprema que el segundo a cargo le administra al jefe de los falsificadores, de una manera puramente gratuita, porque sí, porque él es nazi y los otros son judíos. La escena en que el grupo de falsificadores es descubierto por los otros prisioneros del campo...

IDEAL PARA: Ver una gran peli sobre el tema del colaboracionismo, y por qué no, una gran peli a secas.

ENLACES.

-- (Ir a la página) Entrada en IMDb.
-- (Ir a la página) Artículo de la Wikipedia en inglés.
-- (Ir a la página) Comentario en Cineismo.com.
-- (Ir a la página) Comentario en Ojos de Papel.
-- (Ir a la página) Comentario en Proscritos.
-- (Ir a la página) Comentario en unmundodecine.com.
-- (Ir a la página) Comentario en Pasadizo.com.
-- (Ir a la página) Comentario en Casa Pueblo VC.
-- (Ir a la página) Comentario en Agenda Cultural de Caracas.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [en español de Ezpaña].



-- Trailer de la peli [en alemán, sin subtítulos].



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