Películas de estreno, películas antiguas, películas clásicas, películas bodriosas, películas de todo tipo, comentadas por el arte inefable del General Gato.
Páginas
▼
jueves, 12 de junio de 2014
"Al filo del mañana" (2014).
-- "Edge of Tomorrow". Estados Unidos / Australia. Año 2014.
-- Dirección: Doug Liman.
-- Actuación: Tom Cruise, Emily Blunt, Brendan Gleeson, Bill Paxton, Jonas Armstrong, Tony Way, Kick Gurry, Franz Drameh, Dragomir Mrsic, Charlotte Riley, Masayoshi Haneda, Terence Maynard, Noah Taylor, Lara Pulver, Madeleine Mantock.
-- Guión: Christopher McQuarrie, Jez Butterworth y John-Henry Butterworth, basados en la novela de Hiroshi Sakurazaka.
-- Banda Sonora: Christophe Beck.
-- "Al filo del mañana" en IMDb.
-- "Al filo del mañana" en la Wikipedia en inglés.
¿DE QUÉ SE TRATA?
Una breve secuencia de news nos pone al corriente: BUGS INVADING EARTH!!! Partió como un meteorito, siguió como una expansión de bichos imparables, y acabó en una cosa militarista WWII style, pero futurista (sí, yo tampoco entendía un pimiento). El caso es que después de una imponente victoria en Verdún (Verdún, ¿eh?, Verdún, WWI, lo captan, ¿no?, ¿lo captan?), las fuerzas humanas están listas para ir a patearles todo lo que se llama... er... no, estos bichos no tienen traseros. En medio de todo eso está... ¡¡¡TOM!!! ...que llega tan chulomacarra como siempre, haciéndose el chulomijo ante un milico que, siendo interpretado por Brendan Gleeson, maldita las buenas pulgas que pueda tener, así es que éste se las arregla para que el chulomijo acabe metío en lo más medio del medio de la acción, a ver si así se lo cargan y asunto arreglao (para felicidad de Mimi, Nicole, Penélope, Katie...). En concreto, despierta, descubre que ha sido degradado a soldado raso, y está a punto de ser enviado como carnecañón al frente (aclaremos: ¡¡¡TOM!!! es un civil reclutado a la fuerza por necesidades de la guerra blablablá). ¡Ah! En medio de todo esto está la Full Metal Bitch (best war name EVER), una fulana que se ha cascao a cuanto bichejo se le ha cruzao, casi en plan videojuego first shooter person (asimilen bien este concepto, volveremos sobre él). El caso es que a ¡¡¡TOM!!! (que todavía no se cruza con la Full Metal Bitch) le ponen un exoesqueleto, y... ¡a luchar, soldado! Eso sí, como sus compañeros no le confían esta pija es mía, le dejan el seguro puesto para que no mate a nadie (si los bichos lo matan, buenoooooo... problema suyo. Zanks, bro...). Sucede lo inevitable, que ¡¡¡TOM!!! hace lo posible por sobrevivir en el campo de batalla, cuando de pronto APARECE DELANTE SUYO UN BICHO Y ¡¡¡BAM!!! En una salida desesperada, ¡¡¡TOM!!! decide volarse con el bicho, agarra unas minas, y ¡¡¡BUM!!! Sería todo. ¿Se acabó la peli? ¡¡¡ESTAFA, QUIERO MI DINERO DE VUELTA!!! Eh, no se preocupen. El caso es que a ¡¡¡TOM!!! lo cubre una substancia babosocorrosiva désas que te dan peazo superpoderes y tal, de manera que... ¡despierta en el mismo lugar en donde despertó la última vez, listo para salir a la batalla! ¿Por qué ahí y no cinco años antes? ¿O diez? ¿O cincuenta? ¡Ah, misterios del cine...! De a poco, a medida que pasen las cosas, ¡¡¡TOM!!! descubre que está viviendo el Jodío Día de la Marmota de nuevo. Again. Y luego se muere otra vez. And again. And again. And again. And... discúlpenme, voy a aplicar el copy-and-paste aquí porque me va a salir más corto. ¿Listo? Allá vamos: And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again. And again... Bueno, de eso se trata. Ah, y de ¡¡¡TOM!!! creciendo y haciéndose hombre en el proceso. Again. And again. And again...
EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.
Cuatro tendencias parecen ir entrelazadas desde la segunda mitad de la década pasada a la fecha. 1.- Estados Unidos ya no se ve tan chulo como después del 9-11, y cuando mete la pija en otros países, como que esos otros países se ponen medio malagradecíos de que les traigan la CIVILIZACIÓN, 2.- Una crisis económica que te cagas, y que hace que de pronto el futuro se vea mucho menos prístino y brillante que en, digamos, los '90s, 3.- La creciente tendencia hacia lo darkier and edgier que se ha impuesto en el cine comercial post "The Dark Knight", en buena medida porque ya no somos tan felices como éramos y el cine tiene que reflejar eso o quedarse sin su ración de saqueo en las boleterías (porque de manera contraintuitiva, la industria de la entretención en vez de sufrir con las crisis económicas, suele ir hacia arriba por aquello del factor evasión, o si no la explosión del cine en los '30s en medio de la Gran Depresión no se explica), y 4.- Después de años de declive a favor de lo fantástico post "El Señor de los Anillos" o "Harry Potter y la Piedra Filosofal", el cine de ciencia ficción ha ido regresando lentamente por sus fueros, probablemente porque el futuro ya no es lo que solía ser, y por lo tanto es válido volver a interrogarse por el mismo porque, joer, ése es el pozo infecto en donde iremos a vivir mañana (si es que ya no vivimos en él HOY). En esos respectos es posible entender que Tom Cruise... perdón, ¡¡¡TOM!!! se haya interesado en adaptar una novela ligera japonesa llamada "All You Need is Kill" (en la que se basó un manga dibujado por el compa're detrás de "Death Note"). Sumando así otra peli de SciFi a su currículum (el 2013 fue "Oblivion" y ya se había puesto a las órdenes de Steven Spielberg en "Minority Report"). Ofreciéndonos una peli en donde 1.- Estados Unidos sigue salvando al mundo (el ejército es británico y va a salvar al mundo invadiendo Francia Normandia' style, pero el héroe y el actor que lo encarna, ambos son yankis, como Bastet manda), 2.- No hay crisis económica que valga si primero no remedias el tema de los bichos comeniños que, en la mejor tradición imperialista yanketa, son el ENEMIGO SIN ROSTRO, y por lo tanto fácilmente odiables y detestables, 3.- Militarismo bélico a tope, y 4.- Ciencia Ficción, claro, porque no importa qué tan mala sea la cosa en el presente, el futuro será peor si es que no aceptamos el MILITARISMO YANKETA DE PRO. (Si es con aromas de Cientología, tanto mejor). Es así que llega a los cines la peli "Al filo del mañana", dirigida por el tipo que lo mismo puede regalarnos perlas de acción como "Identidad desconocida", thrillers decentes como "Poder que mata", pelis pinta-sin-salirte-de-las-líneas y faltas de ambición como "Jumper", o derechamente mugres infumables como "Sr. y Sra. Smith". Y basada, cosa rara, en una novela ligera japonesa. Porque a finales de la década pasada presagiábamos que la oleada de supers iba a ser reemplazada pronto por la oleada del manga/anime japonés, y ya estamos casi a mitad de la segunda década y nada ("Dragonball evolución" resultó una mierda pinchá en un palo, "Meteoro" se estrelló de manera indigna en la taquilla, la adaptación de "Robotech" se encuentra en el limbo, otro tanto con la de "Akira"...). ¿Será que aquí es donde comienza el contraataque? ¿Que por fin la marea japonesa empezará a comerse vivo a Jólivu, entre ésta y "Godzilla", preparando el terreno para el 2019 de "Blade Runner"...? Time shall tell. Por el minuto, conformémosnos con "Al filo del mañana", la ración de sci-fi militarista del año, estrenada a la sombra de juggernauts como "X-Men: Días del futuro pasado", "Maléfica", "Godzilla", "Transfome: Age of Extinction" y "El Planeta de los Simios: Confrontación", sólo para asegurarse de que la cosa resulte un fracaso total de taquilla. Joer, los de Jólivu no necesitan una invasión extraterrestre estilo "Marcianos al ataque" para verse en peligro, con elegir mal la fecha de estreno o mandarse un titanicazo en la taquilla les basta...
¿POR QUÉ VERLA?
-- Partamos por lo obvio. Estamos ante una peli de sci-fi militarista. Y esto nos ubica dentro de ciertas coordenadas. Las pelis militaristas, sean de sci-fi o de las bélicas más convencionales, siempre tienen un tufillo fascista, ya que el punto entero de rodar una historia sobre dos ejércitos machacándose es "nosotros los buenos vs. el enemigo sin rostro" (o con rostro malvado, eso es). Incluso las pelis antibélicas pecan de ello: alguien decía (Truffaut, creo, pero no estoy seguro) que es imposible rodar una peli verdaderamente antibélica porque por muy horroroso que se vea que un soldado le vuele el cráneo a otro de un escopetazo, siempre va a ser cool porque, er... admitámoslo, la violencia ES COOL (no que sea correcta ni mucho menos, pero... ES COOL. Por desgracia). Y en la sci-fi militarista el factor fascista es aún más obvio si es que el enemigo a cascar ni siquiera es humano, sino algún abominable bicho que no es un comunista comeniños de manera metafórica, sino que quiere comerse a tus niños de manera literal. "Al límite del mañana" es una peli encantada de ser lo que es: una fantasía parafascista en donde no hay dilema ético porque somos nosotros o ellos. No a los extremos de "300" en donde un grupo de bellos y apolíneos espartanos tienen por misión cargarse a gentes que no son hombres verdaderos sino infrahumanos (y en "300: El nacimiento de un imperio" a una mujer... no me digan machista, la peli venía así), pero si más o menos con las mismas concomitancias. Afortunadamente, la peli sabe bien en qué terreno pisa, y no cae en la exageración paródica estilo "Starship Troopers" (que en la de Verhoeven era intencional, claro, y es que Verhoeven es Verhoeven). Todo lo anterior era para que te hagas la siguiente pregunta: ¿Estás OK con eso? Si la respuesta es sí, te disfrutarás la peli como un enano porque, admitámoslo, hacía tiempo que no teníamos una peli de sci-fi militarista como corresponde (lo que trata de hacer Michael Bay con "Transformers" y secuelas, resultándole las mugres que le resultan en el camino, por supuesto, porque Doug Liman entendió algo muy importante que Michael Bay no: una dosis de realismo ayuda a mejorar el sentido del drama, mientras que el exceso de COOL MIRA-COMO-MOLO por el contrario tiende a anestesiar). Pero si las pelis sci-fi militaristas no te van por lo parafascista y tal, mejor ni te acerques acá. La peli trata de ser disimulada, pero al último igual es un panfleto acerca de lo buenoides que son los yanketas o la coalición anglo a lo menos, yendo a rescatar a Francia (siempre un país invadido lleno de BONYUURRRRRR ZOQUETES) y Alemania (el ORIGEN DEL MAL), y exterminando a una mente colmena nazi-con-otro-nombre en el camino. Advertidos quedan.
-- La estructura de la peli es bastante interesante. Porque lo que estamos viendo, es básicamente lo mismo que un videojuego. Emprendes una misión, fracasas, reinicias, debes buscar otro camino, a ver qué tan lejos llegas... Sólo que esta peli lo maneja con estilo. En definitiva, esta peli triunfa allí donde "Sucker Punch", otra peli también quiero-ser-videojuego, apestaba de solemnidad. También esta peli triunfa allí en donde la original "Hechizo del tiempo" fracasaba: en hacer plausible el salto temporal. En "Hechizo del tiempo", Bill Murray se ve atrapado y condenado a repetir el mismo día porque sí, hace cosas porque sí, y al final cuando se transforma en buena persona se libra del loop temporal... adivinaron, también porque sí. Porque si la peli no tiene moraleja cristianoide, ni pensar en siquiera rodarla. Acá, en cambio, la estructura de saltos temporales con perpetuo botón reset tiene una interesante explicación lógica. Que choca con las leyes de la física conocida, vale, pero, ¿por qué una criatura cualquiera, como adaptación evolutiva, no podría por accidente descubrir la manera de meterse a la caja negra de la flecha temporal y desarrollarlo como el factor decisivo en la carrera armamentista por el dominio ecológico. Es casi como los habitantes del agua que decía que nunca iba a poder colonizarse la tierra firme, y después... luego los habitantes de tierra firme que decían que nunca iba a poderse dominar el aire y el vuelo, y después... Y así sucesivamente. Y a propósito de lo mismo, la descripción de los extraterrestres también es notable. Deben ser la mejor raza extraterrestre que ha aparecido en el cine desde... no se me ocurre desde cuándo. Esencialmente, es un ejército terrestre futurista luchando contra una horda imparable de abominaciones lovecraftianas. Tratar de plasmar abominaciones lovecraftianas en el cine es difícil porque dependen demasiado de lo "in" (lo INnombrable, lo INdescriptible, etc.), y al plasmarlo en el cine, con toda su visualidad, el factor "in" se va... salvo aquí, en donde nunca llegamos a comprender a estas criaturas al ciento por ciento, aunque entendemos que su mecanismo para estructurarse y ganar batallas es asombrosamente lógico... y letal (bueno, hasta que pierden su superchupimegapeazo poder, algo que la peli, por desgracia, no termina de explicar bien. Pero en fin, no podía ser perfecta tampoco).
-- Un aspecto interesante de la peli, es una cierta deconstrucción de la figura del héroe. En una peli convencional, el héroe es un fulano en apariencia común y corriente, pero que tiene habitualmente un rasgo que lo hace especial. Puede ser una condición social o un linaje secreto, un superpoder escondido, o simplemente lo que el cliché llama "tener espíritu" o "hay nobleza en tu corazón", blablablá. La aventura va a servir entonces no tanto para que el héroe surja, sino más bien para que se manifieste: hay como un trasfondo de que el héroe siempre fue héroe en primer lugar, y la aventura lo único que hace es manifestar lo que hasta entonces estaba oculto. En "La guerra de las galaxias" por ejemplo, Luke Skywalker es un campesino de mierda, pero tiene dos rasgos que lo hacen especial: es un creyente (cree todo el blablá sobre la Fuerza del Viejo Ben) y es hijo de un piloto espacial asesinado por Darth Vader (linaje secreto). Claro, después vino "El Imperio contraataca" y el rasgo mesiánico de Luke Skywalker se hace todavía más acentuado. Acá, en cambio, Tom Cruise no tiene absolutamente ningún rasgo definitorio, algo que se hace patente al inicio cuando se lo compara con la Full Metal Bitch, que es una heroína porque ES LA MEJOR, o sea, es la encarnación de lo que ¡¡¡TOM!!! nunca llegará a ser. ¿Por qué entonces ¡¡¡TOM!!! emprende su camino hacia el heroísmo mesiánico? Por accidente, porque queda embadurnado de baba alienígena. Pudo ser él, o pudo ser otro cualquiera. Además, un héroe se define por sus elecciones vitales, que revelan la nobleza en él, porque enfrenta a decisiones potencialmente buenas o malas, mientras que ¡¡¡TOM!!! en realidad da un poco igual lo que haga, porque termine como termine, igual tiene el botón de reseteo para volver a la misma historia (claro, esa historia es un día de mierda de "prepararse para ir a un combate en donde me van a matar de una manera horrorosa", vale, pero aún así... la peli incluso deja entrever que ¡¡¡TOM!!! podría llegar a escaquearse de su deber e irse a vivir unos diítas de vida feliz antes de que los bichos masacren al mundo... para después reiniciar y vivir otros diítas de vida feliz, y así y tal para siempre jamás). Luego, ¡¡¡TOM!!! encuentra a la Full Metal Bitch, y ¡sorpresa! Ella como heroína es una construcción social de la propaganda, a partir de hechos bélicos exagerados, que ella protagonizó ¡por las mismas razones que ¡¡¡TOM!!! ! Es decir, ¡la Full Metal Bitch tampoco era una heroína, también era sólo otra pringá que iba pasando por ahí! Al final, ¡¡¡TOM!!! y la Full Metal Bitch unen fuerzas e intentan parar la amenaza y se vuelven héroes y blablablá, claro, o de lo contrario qué interés podría tener la peli, pero el punto aquí es cómo se pone de relieve que los héroes no nacen ni son mesías enviados a la Tierra para salvarnos, sino en principio gente sin nada en especial, que por el azar más azaroso posible, encuentran circunstancias a través de las cuales pueden llegar a volverse héroes. Estamos aquí en las antípodas de Harry Potter, por ejemplo, en donde el odioso niñato prota es el héroe porque ES HIJO DE LOS PADRES MAGOS QUE PARARON AL JODÍO VOLDEMORT Y TAL. Los fanáticos de Harry Potter y otros héroes de la casta El Especial o el linaje El Elegido, se identifican porque se ven a sí mismos como los Especial o Elegido del momento, sin parar mientes en que en un universo con esas leyes, dichos fanáticos lo más probable es que no serían en realidad el Especial o Elegido, sino el pobre weón al lado que tiene que sufrir al Especial o Elegido que SIGUE SIENDO MEJOR QUE TÚ (y eso, porque NO TODOS PUEDEN SER EL ESPECIAL O ELEGIDO, porque si todos lo son, como apuntaba el crío de "Los Increíbles" y el villano dejaba caer también, entonces nadie es el Especial o Elegido). Esta peli pone las cosas un poco en su lugar. Porque todos tenemos que sufrir la versión mundana de esto, no el Especial o el Elegido, sino el "yo soy exitoso porque soy emprendedor y los demás son fracasados porque son unos flojos", y el exitoso es presentado como modelo a seguir por sus triunfos personales, cuando en realidad, si bien el común de las historias de éxito tienen que ver con esfuerzo y dedicación personales, también hay factores de azar, tales como estar en el lugar correcto y en el minuto correcto, hacer las alianzas correctas... y traicionar al pobre weón correcto en el momento correcto. La trastienda del heroísmo es bastante más sórdida de lo que parece, y esa mitología del héroe es en lo que "Al filo del mañana" pone la llaga.
-- ¿La realización? Muy bien. Un ¡¡¡TOM!!! renunciando a hacer el chulomijo por una vez en la vida e interpretando un rol bastante más cable a tierra (una sanguijuela rastrera al inicio, un pobre weón sufriendo el infierno en vida a mediados de la peli, y al último convertido en una especie de sensei gurú... y curiosamente, a diferencia de otras pelis, haciendo de chuloputo molón en la primera parte, no en la última, lo que es un plus por supuesto). Una Emily Blunt a quien se le dan de sobra los roles de chica dura, tal como pudimos atisbarlo en "Looper", y que aquí se desmadra todavía más. Un Bill Baxton como sargento militar cabroncete que es un gusto verlo en pantalla apostillando a ¡¡¡TOM!!! Un guión bien estructurado que sabe matizar los aspectos más draconianos del infierno militarista con bien recibidas perlas de humor negro, y que sólo viene a decaer un tanto al final, que para todo lo que hemos visto hacia atrás, peca de ser un tanto convencional (vamos, si ya sabíamos que iba a acabar de la forma en que acaba, si estaba cantado a partir de la premisa). Un Christophe Beck que se la pasa pipa atronando con todo en la banda sonora. En definitiva una peli que no es genial ni una obra de arte, pero que está hecha con pie bastante aplomado, que hace creíble a los personajes, que no se rinde a lo molón en pos de lo molón, y que se dedica a un arte casi olvidado en el cine blockbuster de estos días: contar una historia QUE PUEDE IMPORTAR A LA AUDIENCIA.
IDEAL PARA: Fanáticos de la ciencia ficción militarista, críticos del mito del héroe, fanáticos de los videojuegos, y en general el público que quiera ver un blockbuster decente en vez de la cuarta peli de los Transfomes.
VIDEOS.
-- Trailer de la peli [en inglés, subtítulos en español].
Si, es aceptable para ver sin demasiado misticismo. Disfrute de los fallidos intentos del personaje principal por librarse de su situacion, y la inmisericorde simpleza de la Full Metal Bitch para reinciar el dia.
ResponderBorrarYo la encuentro muy buena, pero me decepcionó el final. Aunque uno pueda querer que todo salga bien cuando se termine, también sabe que no es lo correcto, que no sucedería así de ser verdad.
ResponderBorrar