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domingo, 24 de agosto de 2008

"2 días en París" (2007).


-- "Deux jours à Paris" (título original), "2 Days in Paris" (título internacional en inglés). Francia / Alemania. Año 2007.
-- Dirección: Julie Delpy.
-- Actuación: Julie Delpy, Adam Goldberg, Daniel Brühl, Marie Pillet, Albert Delpy, Aleksia Landeau, Adan Jodorowsky, Alexandre Nahon, Charlotte Maury-Sentier, Vanessa Seward, Thibault De Lussy, Chick Ortega, Patrick Chupin, Antar Boudache, Ludovic Berthillot.
-- Guión: Julie Delpy.
-- Banda Sonora: (¿no adivinan quién repite nombre...?) Julie Delpy.

¿DE QUÉ SE TRATA?

A bordo de un tren, una neurótica pareja postmoderna llega a París. Ambos no pertenecen a la cultura indígena, sino que forman parte de ese raro club social conocido como "intelligentzia", "culturetismo", o más crudamente dicho, "esnobismo intelectual". Ella es francesa de París, y como buena francesa de París, es muy chula y guay, y también muy liberal. El es un fotógrafo estadounidense, y reúne todos los clichés del macho triste: es macho-sensible, inseguro hasta fumarse una cajetilla entera y seguir, y permanentemente desencajado del mundo y sus miserias. Se van a alojar dos días en la casa de los padres de ella, y ahí comienza el calvario. Porque si ella es estrambótica, sus padres bordan más o menos lo mismo. El pobre tipo se queda alucinado con la cultura francesa, o lo que de ella se muestra (que como acá en Chile, en realidad es un pretexto de un grupo de narcisistas encumbraos que flipan en onda yo soy guay para tener sepso), en particular porque no termina de encajar en ella. Porque la ondilla media liberalistoide de su chica no lo termina de convencer (por "liberal" entendemos: la chica ha tenido sus tórridos escarceos por aquí y por allá). Tampoco ayuda que ella, con su mejor espíritu "pobrecito, vamos a protegerlo de mi misma y mis propias travesuras, y no le digamos nada de con quién me he revolcado", pero insisto, no por ella misma sino para proteger a su pimpollo, miren qué guay ella, empieza a enhebrar una que otra mentirilla sobre que ése tipo no significó nada en mi vida (salvo por salpiconcitos varios con aceite de la sartén, claro está), y bueno, eso no ayuda a consolidar la relación... serán las 48 horas más infernales de la pareja, y nadie garantiza que las cosas deban resultar como deben. Eso, salvo que nos encomendemos al espíritu de Santa Julie Delpy, que escribió el guión de esta peli, la coprodujo, la dirigió, la protagonizó, la editó, la musicalizó, y si no se quedaba cada noche a barrer el set del estudio es porque... porque... porque... hmmmmmm... ¿y si lo hubiera hecho, también...?

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Julie Delpy es de esas actrices que en alguna época remota estuvo a punto de ser the next best thing, pero que la arrogancia, las pésimas decisiones y un poco de mala suerte en el camino, la relegaron al rol de la promesa eterna que nunca llega a ser. Su irrupción a nivel internacional fue por el protagónico de "Blanc", la segunda parte de la trilogía de los Tres Colores (¿trilogía de tres...? ¿en serioooooo...?) que rodara el malogrado Krzysztof Kieslowski (ya había tenido un papelillo ultrasecundario del que nadie se acuerda, en "Los tres mosqueteros", sí, la de Sutherland/Sheen/O'Donnell). Su nombre siguió en alto con la sobrevalorada y aburridísima "Antes del amanecer", y luego la cg... perdón, metió la pata con "Un hombre lobo americano en París", y a partir de entonces, todos fueron papeles que, más que papeles, parecen cameos. Y los años pasan, la vejez llega, y ya sabemos que las actrices valen por su contrato con Revlon y no por su talento actoral (por cada Streep que ha conseguido envejecer y sobrevivir en Hollywood, hay cuarenta actrices con carreras prematuramente abortadas por la pérdida de, ejm, vigor y presencia física, podríamos decirlo así). De manera que Delpy dio el paso que otras actrices tratan, para mantenerse vigentes: saltar a la dirección. Paso que no siempre funciona (Jodie Foster lo intentó con "Nell", siendo escritora/directora/protagónica, y por suerte que la actuación se le siguió dando o si no ya estaría cobrando el seguro del paro). He aquí entonces la opera prima de una actriz semiacabada, el manotazo de ahogado para mantenerse vigente en el cruel mundo de la intelectualidad artística (cinéfila, en este caso). Maniobra que parece haberle resultado bien, como que después se embarcó en otros proyectos, ejm, "autorales". Por lo menos cosechó el aplauso del público, o el segmento más refinado de éste al menos. Lo que, como de costumbre, suele decir más sobre las personas que ven una peli, que sobre la calidad de la peli en sí, pero en fin...

¿POR QUÉ VERLA?

-- ¿Por qué el mismo público que rechazó "Sex and the City" por ser superflua y banal, enfrentado a "2 días en París" la encontró la rechifla y saludó a Julie Delpy como la nueva Woody Allen francesa, cuando en realidad ambas pelis son casi la misma cosa? Las dos se tratan de chicas neuróticas treinteañeras, emperradas en no crecer, y que se refugian en su mundo de fantasía para evitar colisionar con la realidad y con el compromiso (en un caso ese mundo de fantasía es la joyería, la alta costura y los manolos, y en otro es el culturetismo diletante, pero mundos de fantasía al final del día). Y no vemos aquí un progreso notable por sobre la obra maestra de Darren Star. La peli de Delpy es un monumento a, bueno, el egotismo de justamente la diva, la Delpy, desesperada por tratar de sacar adelante una peli en donde demuestre de una vez por todas que ella es grande, única y nuestra. Puede alegarse en contra, por supuesto, que es una peli casi artesanal, producida a puro ñeque, un estilo de cine personalizado que casi no se estila en la era de grandes blockbusters de 250 millones de dólares que no alcanzan para comprarle alma propia a las cintas, pero claro, por otra parte podría decirse qué tan dificultoso podría haber sido conseguir financiamiento, si el proyecto de verdad hubiera podido venderse por sí mismo... La peli trata de ser irónica y distanciarse de la Delpy, pero a las últimas, es ella quien se supone llena la pantalla con lo que, nosotros debemos creernos, es su carisma personal. Cuando la Delpy trabajaba para otros directores estaba inmensa como la vida (ahí la tienen en "Blanc" de Kieslowski, sin duda el apogeo de su carrera), pero acá, dirigiéndose a sí misma, demuestra no tener claras sus limitaciones. Se la ha saludado como una especie de Woody Allen femenina en francés, pero para Woody Allen, mejor el original, que después de todo por algo inventó la fórmula del narcisismo neurótico autorreferente gracioso. Para colmo, la Delpy trata de hacer la movida cultureta de "soy crítica de mi país y soy crítica de la cultura occidental", y se le ocurre meter algunos chistes políticos ultrasobados, que a estas alturas del partido ya no tienen gracia (¿se supone que el gag del taxista racista debía hacernos reir inteligentemente...?). Incluso el final, en donde se resuelve toda la tensión dramática acumulada, está contado desde la no muy interesante perspectiva de ella, en vez de dejar fluir al libre juego de actores, resultando en uno de los finales más WTF que ha producido el cine en los últimos años, por su rampante narcisismo. Pero si eres un cultureta de pro, quizás aquí encuentres tu fantasía proyectada, de una chica bonita y con algo parecido al talento, metida a artista, que saca adelante un proyecto personal y es muy alabada por eso. O sea, la Princesita del Cine Cultureta Francés, directo para tus ojos. Si eres cultureta de pro, deberías saber apreciar eso.

-- La peli a ratos resulta graciosa. Las más de las situaciones en realidad son de risas forzadas, porque los protas son lo suficientemente antipáticos como para que, en un análisis más frío de la situación, no consigas empatizar con ellos (y si empatizas con ellos, ponte rápido en tratamiento, porque te advertimos, TIENES UN PROBLEMA). Pero a veces, cuando la Delpy se olvida de forzarse a ser graciosa, o trata de evitar ponerse a sí misma conscientemente en ridículo para decirnos "¿ven que no soy tan narcisista y me puedo reir de mí misma? ¿ven-ven-ven-ven-ven...?", consigue algunas buenas risas.

-- Dura algo menos de hora con cuarenta. No es tan largo el martirio, por suerte. Peor hubiera sido que fuera como "24" y hubiera narrado esos mismos dos días, en tiempo real...

IDEAL PARA: Hacer ejercicio de onanismo cultureta.

ENLACES.

-- (Ir a la página) Sitio oficial de la peli.
-- (Ir a la página) Entrada en IMDb.
-- (Ir a la página) Artículo de la Wikipedia en inglés.
-- (Ir a la página) Entrevista a Julie Delpy sobre la peli.
-- (Ir a la página) Comentario en Blog de Cine.
-- (Ir a la página) Otro comentario en Blog de Cine.
-- (Ir a la página) Comentario en El Cine... Una Realidad Poética.
-- (Ir a la página) Comentario en Bien Ahí.
-- (Ir a la página) Comentario en Disorder.cl.
-- (Ir a la página) Comentario en Mi Cine - por Halbert.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [en inglés, sin subtítulos].



-- La escena cuando van a tomar un colectivo [en inglés, sin subtítulos].



-- Conversación sobre el moho negro [doblada al español de Ezpaña].



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