11 años de Cine 9009 en línea.

El próximo 19 de febrero de 2017, Cine 9009 cumplirá once años en línea. Sí, jodíos, cuéntenlos, once en total desde su inauguración en el ya lejano 2006. Y para celebrar, estamos embarcados en una minimaratón de posteos. De manera que entre el domingo 12 y el domingo 19 del febrero que ya mencionamos, habrá un posteo nuevo con una peli nueva cada día, en donde aprovecharemos de repasar algunas que vimos en el cine, y que por un motivo u otro no acabaron publicadas en su día. Y a no quejarse de que llegó demasiado tarde, que ya no las podemos ver en el cine y otras cosas. También está el cable, el streaming, los DVDs para los cuatro gatos que todavía los compran, y... er... well... medios menos legales para conseguírselas. Además, si fuera por eso, no habría posteado pelis de cine mudo que se estrenaron hace sus buenos 90 o 100 años atrás. De manera que... disfruten, y saludos para todo el mundo (eeeeeexcepto para ese perejil de allá... sí, tú, a tí te hablo... el de la IP chistosa... te reconozco, eres el imbécil que no apagó el smartphone el otro día en el cine. Cretino. Pero para el resto, saludos).

domingo, 28 de diciembre de 2008

"La guerra de los mundos" (1953).


-- "The War of the Worlds". Estados Unidos. Año 1953.
-- Dirección: Byron Haskin.
-- Actuación: Gene Barry, Ann Robinson, Les Tremayne, Robert Cornthwaite, Sandro Giglio, Lewis Martin, Houseley Stevenson Jr., Paul Frees, William Phipps, Vernon Rich, Henry Brandon, Jack Kruschen, Cedric Hardwicke.
-- Guión: Barré Lyndon, basado en la novela de Herbert George Wells.
-- Banda Sonora: Leith Stevens.

-- "La guerra de los mundos" en IMDb.
-- "La guerra de los mundos " en la Wikipedia en inglés.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Adivinen quién viene a cenar. Una pista: son huéspedes que han viajado noventa millones de kilómetros por el espacio y están de muy malas pulgas. Su planeta natal, llamado Marte por los antiguos, está agonizando. Y no tienen otro lugar en el Sistema Solar para ir, salvo... ¡la Tierra! Bueno, hay un problema, la Tierra está poblada por criaturas sintientes llamadas humanos. Oh, bueno, un inconveniente menor, nada que los métodos de Asurbanipal, de Tamerlán, de Francisco Pizarro o de George W. Bush no puedan arreglar. Los habitantes de la Tierra se sienten sorprendidos cuando de pronto empiezan a caer meteoritos desde el espacio. Desde el inicio los meteoritos se ven raros y huelen a raro, por no decir que radioactivan raro, porque en sus cercanías mi buen amigo el Geiger empieza a pitorrear como loco. Uno de estos científicos se ha aparecido, y como love constantly blossoms incluso en las peores tragedias hollywoodenses, se las arregla para empezar a camelarse a una chica que, muy liberal ella, se ha puesto a estudiar ciencias en vez de estar lavando pañales en una de esas casitas de suburbios de los '50s. Pero de pronto, el meteorito empieza a abrirse. ¿Está seguro de lo que redactó, mi General Gato? No se supone que los meteoritos se abran... Sí, estoy seguro, caramba, este meteorito se abrió. Porque no era un meteorito sino... ¡¡¡BUAAAAAÁ...!!! ¡¡¡TENGAN MIEDO!!! ¡¡¡TENGAN MUCHO MIEDO!!! Porque han venido a la Tierra a sembrar el pánico, a quemarlo todo con sus poderosos rayos paralizantes... Empieza entonces la imparable marcha de los marcianos por sobre el territorio que alguna vez fueron los Estados Unidos, y ahora es el Imperio Marciano. Bueno, cambio de amos, qué tan malo puede ser... Para los yankis, acostumbrados a mandar sin que los mandes, que para eso somos descendientes espirituales de George Washington, es toda una tragedia, claro está. ¡Se acaba el Imperio Norteamericano! (Nótese que la peli, a pesar de traernos catástrofes de todas partes del mundo, y hasta se mencionan que caen dos meteoritos de Troya en Santiago de Chile y todo, no dice una sola palabra sobre lo ocurrido al otro lado del Telón de Acero). ¿Conseguirán nuestros heroicos humanitos defender el último bastión de la civilización, una ciudad de Los Angeles entregada a los ruegos al Señor estilo "líbranos del furor de los normandos", quiero decir, de los marcianos...? Una pista: El final de esta peli es el mismo final del libro. Y no, no cuenta como spoiler, porque después de todo... ¿Queda alguien en la moderna civilización occidental que aún lea libros...? Quiero decir, aparte de los harrypotteros, los seguidores de "Crepúsculo" y las lectoras de "Sex and the City"...

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Nadie hubiera creído a mediados del siglo XX que las audiencias estaban siendo observadas por inteligencias más grandes que el espectador promedio, y sin embargo tan letales como éste; que los espectadores, ocupados como estaban en sus asuntos, estaban siendo escrutados quizás tan minuciosamente como el hombre con un microscopio puede escrutar a las criaturas transitorias en una gota de agua. Con infinita complacencia los espectadores iban al cine a ver sus pequeñas películas, seguros de su dominio sobre su dinero en la taquilla. Es posible que los infusorios bajo el microscopio hagan lo mismo. Y en 1953, vino la gran desilusión. Porque en ese año llegó... ¡"La guerra de los mundos"! Bueno, varias cosas habían pasado en el camino. En 1945 había estallado la bomba atómica, y pendía sobre el mundo el miedo a que alguien apretara el botón e hiciera saltar al mundo en astillas (y exportarlo subsecuentemente a Japón, imaginamos). Además estaba el miedo a los malos, a los malvados rojos, enemigos de nuestra democracia y del american way of life. En 1946 el vejete Wells se había muerto, y sus herederos se hicieron así con los derechos de su obra (¡hey! ¿No se supone que se le da derechos de autor al autor por haber creado una obra? ¿Qué demonios pintan los p**** herederos en todo esto?). Ya había una adaptación radiofónica, la célebre de Orson Welles de 1936 que desató la histeria colectiva, además de algún que otro quiebre sentimental ("Días de radio" dixit). Bueno, ahora llegaba la adaptación cinematográfica de rigor. El cine de Ciencia Ficción, por aquellos años, estaba alcanzando un grado de madurez, con pelis como "Destino: La Luna", "Cuando los mundos colisionan", "Ultimátum a la Tierra", "El enigma de otro mundo"... Siempre lidiando con el tema de los extraterrestres como una amenaza contra la buena y vieja Tierra (no me digan que "Ultimátum a la Tierra" es pacifista, que para eso enviaban a alguien menos bárbaro que la dupleta Gort-Klaatu). Las audiencias podían considerarse listas entonces para el clásico quintaesencial del género "la Tierra es nuestra y la defenderemos porque nos pertenece". George Pal la adaptó (como productor, eso sí). Con buenos resultados. Los herederos de Wells, de hecho, quedaron tan complacidos, que le dieron el pase para rodar cualquier otra cosa de Wells. Bueno, así tuvimos otra joyita, que fue "La máquina del tiempo". Pero ésa es otra historia.

¿POR QUÉ VERLA?

-- Olvídense del desastroso remake ése, "La guerra de los mundos" de Steven Spielberg, de dirección tan recia como de contenido inane, y que del original wellsiano tiene poco más que el título y los cinco segundos de inicio y de final. El clásico de 1953 sigue siendo imbatido. Una de las gracias que tiene la novela original, a pesar de que hoy en día su lectura puede ser un tanto fastidiosamente decimonónica después de tantos bicharracos que nos han invadido (bueno, "La Crónica de las Sombras", "ID4", "Marcianos al ataque", el Marciano Zim...), es justamente su carácter canónico, su carácter de Manual Alien-Ops. Eso, la peli lo rescata bien. Lo que tienen en la peli es puro canon, una historia de invasores estereotipada de principio a fin, pero en eso no traicionan la novela (bueno, en 1897 hablar de marcianos invasores era ser original, reconozcámosle eso a papi Wells) intentando ser más chupis cada vez. A cambio, la peli se carga toda la corrosiva sátira social de Wells (recordemos, el buen Herbert George Wells era socialista fabiano, que era lo más cercano a ser rojito en la Inglaterra del XIX) y la reemplaza por un discurso procristiano en el cual los nucleopepinazos no sirven de nada frente al enorme poder y misericordia de Dios (sí, marcianos y satánicos, más encima, para violar la Voluntad del Altísimo de que la Tierra Prometida para los judíos y América para los Americanos, ehm). Pero bueno, es para las audiencias God-blessed yanketas del '50, no les pidamos tanta sofisticación tampoco. Como decíamos a propósito de "La máquina del tiempo", que como comentábamos también fue parida por George Pal, H.G. Wells no es un escritor fácilmente adaptable al cine sin una buena blandeguización para evitar los aspectos más filosos de su pensamiento y hacerlo más accesible a las audiencias autocomplacientes de ayer y hoy. Pero puñaladas traperas contra Wells aparte, quedémonos con la imagen de la invasión extraterrestre, que al menos el sentimiento de impotencia contra los marcianos no se lo cargaron.

-- La imaginería visual. Estos tipos tenían clara la película: de los dos millones de dólares del presupuesto (¡vaya una cantidad irrisoria para los estándares de hoy, ya podría aprender algo Sam Raimi para "Spiderman 3"!), 600.000 fueron para las escenas en vivo y 1.400.000 para los FXs. Sí, puede criticarse que se gaste más en lo chulo de las máquinas que en la parte que verdaderamente importa, o sea, los actores puestos ahí para gritar que me ha matao un marciano, joer... (el Síndrome "Transformers", llamémoslo). Pero quedó estupendo. Los efectos especiales de esta peli como tales, hace rato que pasaron de moda por supuesto. Pero las máquinas marcianas siguen viéndose aterradoras y letales, y uno les compra que te pueden dejar quemao en segundos. Aún hoy se ven ominosas mientras marchan, lenta pero implacablemente, hacia la dominación mundial, con mucha más gallardía que un Black Hawk al uso. Casi dan ganas de que ganen.

-- Los marcianos. Bueno, no son exactamente como en la novela, pero qué importa. En general se ven como una civilización avanzada, y a diferencia de otras pelis en que los alienígenas, por eso de ser alienígenas, tienen las tácticas más extravagantes de ataque (y es que el público son unos taraos, que creen porque los extraterrestres piensan distinto a los humanos deben hacer cosas estúpidas y sin sentido humano, y las leyes universales de la geopolítica a tomar aire por el c***), o bien que recurren al siempre muy socorrido asalto frontal y que gane el más mejol, en esta peli los bichos son presentados como estrategas geniales, a la vez que prisioneros de algunos esquemas mentales que les son muy propios (la fijación con el número 3). Dicho en simple: son letales no sólo porque tienen mejor tecnología, sino también porque son unos Zukhov moviéndose sobre el mapa. Además, la marioneta que hace de marciano está de lo más bien (sí, el muñeco canta un poco, pero es que 1953, ¿vale? Además, sigue viéndose más realista que esos CGI low-budget de algunas pelis actuales).

-- El final. OK, es el final de la novela, y OK, está teñido de religiosidad malentendida (la guerra es de Marte, pero la Humanidad es de Dios), pero aún así, sigue siendo acojonante.

IDEAL PARA: Ver una clásica y arquetípica peli de invasores extraterrestres, y en el fondo, una peli sobre el miedo a que los que no son como nosotros, virtuosos demócratas amantes de Dios, terminen imponiéndose y ganando la partida.

OTRAS PÁGINAS SOBRE "LA GUERRA DE LOS MUNDOS".

-- (Ir a la página) Datos del doblaje de esta peli en España.
-- (Ir a la página) Comentario en El Sitio de Ciencia Ficción.
-- (Ir a la página) Comentario en Arlequín.
-- (Ir a la página) Comentario en Klownsasesinos.
-- (Ir a la página) Comentario en El Criticón.
-- (Ir a la página) Comentario en La Cinta de Moebius.
-- (Ir a la página) Comentario en Cinefania.
-- (Ir a la página) Comentario en La Ciencia en el Cine.

VIDEOS.

-- Introducción de la peli con créditos [en inglés, subtítulos en español].



-- Primera batalla entre los marcianos y la mili [en inglés, subtítulos en español].

jueves, 25 de diciembre de 2008

"Agnes de Dios" (1985).


-- "Agnes of God". Estados Unidos. Año 1985.
-- Dirección: Norman Jewison.
-- Actuación: Jane Fonda, Anne Bancroft, Meg Tilly, Anne Pitoniak, Winston Rekert, Gratien Gélinas, Guy Hoffman, Gabriel Arcand, Françoise Faucher, Jacques Tourangeau, Janine Fluet, Deborah Grover, Michele George, Samantha Langevin, Jacqueline Blais.
-- Guión: John Pielmeier, basado en su propia obra teatral.
-- Banda Sonora: Georges Delerue.

-- "Agnes de Dios" en IMDb.
-- "Agnes de Dios" en la Wikipedia en inglés.

¿DE QUÉ SE TRATA?

En un convento católico ocurre el desastre. Aparece una monja enteramente ensangrentada, y con ella, un neonato muerto. El asunto es de la máxima delicadeza, porque no se puede impedir una investigación judicial, pero por otra parte, ¡cómo sufriría la reputación de la Iglesia Católica! (eran los tiempos anteriores a que se hicieran públicas las decenas de denuncias por pedofilia, entendámonos). De manera que envían a una psicóloga a hacer una serie de evaluaciones que, mire usted, ejem, de lo que se trata es que la vea, le haga un par de preguntas y luego declare que está loquita, para que no vaya a juicio, y salvar así la integridad de la Santa Madre Iglesia. Pero como suele ocurrir en estos casos, la psicóloga resulta ser demasiado profesional, y en vez de limitarse a lo que le piden, eso es, un simple informecito que vaya a engrosar algún carpatacio burocrático por ahí, pues bien, se mete a tratar a la chica. A poco andar descubre que la pobre está loca como un millonario con hormigas, y que padece un cuadro psicótico completito desde el alfa hasta el omega, con creencia de que su niño muerto es hijo de Dios mismo incluido. Y para enturbiar más el asunto, resulta que toda la psicopatología, y el infanticidio subsiguiente, tienen que ver con un oscuro pasado de abuso sexual infantil en el cual las monjas parecen saber más de lo que debieran. Luego viene lo de rutina: las monjas se cabrean, el Monseñor trata de cerrar la investigación, etcétera, mientras la heroica psicóloga trata por todos los medios de llegar hasta el fondo de la verdad, por el bien y salvación de la pobrecita hermana Agnes y su alma eterna.

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

En los '60s, con clásicos camp como "Barbarella", Jane Fonda se había entronizado como la reina de la contracultura sicodélica pop. Ya en los '80s, algo más madurona, se consiguió hacer un nombre y reputación de actriz seria con filmes de cierta enjundia como "El síndrome de China", "La mañana siguiente" o "Gringo viejo" (eran los años anteriores a su esplanchurrante retorno como suegra de Jennifer López en "Una suegra de cuidado"). Uno de esos filmes "de catego" que protagonizó fue éste. Cómo rayos pasó este filme abiertamente anticatólico al cine, es en verdad un misterio, considerando que aunque el grueso de la industria fílmica de Estados Unidos está controlada por los judíos, éstos se cuidan muy bien de enemistarse con los poderosos grupos de lobby WASP, no por prurito religioso ni tolerancia ecuménica, sino porque éstos mueven suficiente poder para conseguir la censura o el boicot de cualquier filme (o sea, por la pasta, quiridi). Pero el caso es que el filme pasó, se le encomendó el rodaje a un director "no católico", por decirlo suavemente (y es que Norman Jewison era además el productor, ejem), y le dieron el rol principal a Jane Fonda, que venía interpretando esos roles serios, como ya lo dijimos, y la pusieron frente a frente contra la gran Anne Bancroft. El resultado, francamente, no pudo ser mejor.

¿POR QUÉ VERLA?

-- Es una de Jewison. Sin ser un director de primera categoría, ni un innovador del lenguaje cinematográfico, Norman Jewison ha filmado varios pequeños clásicos del cine, incluyendo "Rollerball" y "El caso Thomas Crown" (las originales, no los remakes con Rebecca Romijn o Pierce Brosnan), "Al calor de la noche", "F.I.S.T." y "Jesucristo Superestrella", entre otras. En "Agnes de Dios" se muestra una vez más como el director sólido y de formación clásica que es, rodando con naturalidad y sin grandes aspavientos una historia que se basa en lo principal, en los personajes y los diálogos, en vez de los golpes de efecto tan propios de los filmmakers de la Generación MTV.

-- La tríada de protas está por todo lo alto. Meg Tilly como la hermana Agnes se roba la película, por supuesto, con una muy cuidada interpretación de media loquita tirando para loquita entera sin remedio (si les suena como a "Jennifer Tilly", es porque ambas actrices son hermanas). Jane Fonda vuelve a demostrar que se la puede con un rol de alturas, creando a partir de un personaje que en el papel no pasa de ser la heroína idealista al uso, una verdadera funcionaria honesta con su trabajo, sin caer en los manierismos superheroicos de, por decirlo, un Denzel Washington por ejemplo. Y Anne Bancroft no es por nada una leyenda del cine, y aquí vuelve a demostrar por qué, creando una hermana rectora de convento tozuda como la vida misma, pero sin caer en los clichés del malo malísimo que trata de conservar su poder escondiendo la verdad, BUAHAHAHAHÁ!!!; incluso podemos comprender (no necesariamente aceptar) la difícil posición en la que se encuentra por su cargo, por su relación con Agnes, y por sus propias convicciones religiosas.

-- Esta película se atreve con un tema muy peliagudo, que por lo mismo, por tocar y herir sensibilidades religiosas, no es muy recurrente en el cine (salvo, quizás, y de manera un tanto más burda, en "El exorcismo de Emily Rose"). Este tema es la llamada "neurosis de conversión", es decir, la clase peculiar de psicosis que se traduce en una psicomatización, en este caso, los estigmas y el "nacimiento virginal". Y lo hace con honestidad y hondura, sin rehuir su carácter de fenómeno perfectamente estudiable por la ciencia (en este caso la psiquiatría), al revés de otros filmes que explotan el temor supersticioso hacia los fenómenos de la neurosis de conversión para asustar con el Coco y cosas así.

-- Tampoco es un filme complaciente con la Iglesia Católica. No se los muestra como los villanos de la película (al revés de la entretenida, pero burda, "Estigma"), ni como un nido de conspiradores tratando de encubrir la verdad (como por ejemplo en "El Código Da Vinci"), sino como una organización con intereses creados que utiliza los canales habituales para maquillar los problemas con mano mora, léase conversaciones de pasillo con funcionarios judiciales y cosas así. O sea, se los muestra como una entidad bien terrenal y asentada, ni la más honesta, ni tampoco particularmente malvada. Una visión realista, que se llama.

-- La trama está particularmente bien resuelta. La premisa y la tensión dramática giran en torno a algo que, a pesar de estar disfrazado de encuesta psiquiátrica, es en realidad una verdadera investigación policial. Sin embargo, el suspenso no sale a partir de un baile de sospechosos, ni hay malos malosos tratando de eliminar a los testigos a punta de pistola, ni nada por el estilo, y bien mirado, ni siquiera hay un misterio demasiado grande, sino que la tensión se resuelve a partir de la peculiar condición psiquiátrica de Agnes, en cuyo interior se encuentran en realidad las respuestas a lo que ocurrió verdaderamente la noche de infanticidio, aunque tamizado por su peculiar psicosis. Dicho en cristiano: es una película policial que consigue tensionar sin utilizar ninguno de los tópicos y clichés clásicos del cine policial. Todo un logro.

IDEAL PARA: Ver una película policial, enterarse de un par de cosas sobre la psicología de los fenómenos paranormales cristianos, y disfrutar con tres grandes actuaciones femeninas como suplemento.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [en inglés, sin subtítulos].



-- La psiquiatra y la monja cucú, conversando sobre fumar, sobre obsesiones y sobre de dónde vienen los bebés [en inglés, sin subtítulos].

domingo, 21 de diciembre de 2008

"La dama de Shangai" (1947).


-- "The Lady from Shanghai". Estados Unidos. Año 1947.
-- Director: Orson Welles.
-- Actuación: Rita Hayworth, Orson Welles, Everett Sloane, Glenn Anders, Ted de Corsia, Erskine Sanford, Gus Schilling, Carl Frank, Louis Merrill, Evelyn Ellis, Harry Shannon.
-- Guión: Orson Welles, basada en la novela "If I Die Before I Wake" de Sherwood King. Sin acreditar: William Castle, Charles Lederer, Fletcher Markle.
-- Banda sonora: Heinz Roemheld.

¿DE QUÉ SE TRATA?

A veces no hay más remedio. Un hombre tiene que hacer lo que tiene que hacer. Aunque eso le haga parecer un tonto. Porque, es que verán, el prota es muy tonto. Y si luce como un héroe, es en realidad por la pura suerte. Conoce a una chica, y la chica empieza a hacerle miriñiñis con los ojitos. Luego, todo muy tipé, tiene la suerte de hacerse el galancete partiéndole el moño a unos prójimos que intentan asaltarla. El tipo ha sido marino, ha estado en la Guerra Civil Española (en ese tiempo distante algo más de diez años en el tiempo, recuérdese que la peli es fines-'40s). Ligerito, y de puro califa, acaba reclutado en el yate con la chica, el marido de la chica (un abogado paraplejicoide) y un amiguete/socio del abogado. Emprenden un viajecito entre amigos, en donde nuestro prota cuenta una historia de tiburones que se supone, viene con metáfora/moraleja. Y empieza a darle al tarro con la chica, y ella, parece que también. El abogado mira, pero no dice nada. Too muuuuuu raro, si me preguntan. Pero el amiguete del abogado... El tiene el falible plan infalible para torcer las cosas. Fingirá su muerte. Desaparecerá. Read my lips, no more taxes. Y para eso necesita que el marinerito enchapao por la chica, finja ser su asesino firmando una confesión para que al desaparecido lo registren oficialmente como en defunción, aunque nunca lo van a mandar a prisión porque no habrá cuerpo. Resquicio legal, que le llaman. Pero como suele suceder en estas pelis, nada es lo que parece, y todo no es más que un alambicadísimo plan para... ¿Para...?

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Los '40s fueron el esplendor del Cine Noir, con perlas como "El halcón maltés", "El enigma del collar", "La senda prohibida", "El sueño eterno"... Orson Welles también se apuntó a la moda. Repasemos un poco. Orsoncito había sido el niño genio que a los 25 años había parido la peli más genial de todos los tiempos, "Ciudadano Kane", que si no la has visto, arrójate de cabeza a un pozo, ¡oh, tú, pobre pagano! Pero para un hombre de genio titánico como Welles, el sistema de los estudios, en donde los $%%/$%&/ productores te decían todo lo que tenías que rodar y hacer, tenía que oprimirlo hasta la anoxia. Necesitado de dinero, Welles hizo el Fausto y pactó con Columbia Pictures para rodar esta peli. Filmada a desgana por Welles, por cumplir un contrato, con su esposa Rita Hayworth como femme fatale (sí, Welles estuvo casado con la Hayworth, cabrón hiiiiiijjjjjj...d...p***), lo que por supuesto no auguraba nada al matrimonio, que de hecho terminaría disuelto poco después de terminar este rodaje, y reducida drásticamente de dos horas y media a apenas una hora y media por los Eduardos Manostijeras del estudio, la peli terminaría transformándose en un pequeño clásico del Noir. Irónico destino, si se considera que nadie en los estudios Columbia Pictures, ni Harry Cohn que lo controlaba, ni Orson Welles que la dirigía, pudieron siquiera descifrar de qué demonios se trataba.

¿POR QUÉ VERLA?

-- Partamos por las malas noticias. Existe un misterio policial en toda forma. Tan en toda forma, que nadie ha conseguido descifrarlo jamás. El diálogo final, supuestamente debería armar todos los elementos de la trama, pero no lo consigue. Para colmo, el asesinato mismo viene a mitad de peli. O sea, como policial no funciona. Como peli con moralina (ya saben, "pobres niños ricos respetables por fuera y podridos por dentro"), no sale del estándar usual del Noir en aquellos años. En ese sentido, para verla, el espectador moderno debe armarse de paciencia suprema. No quiero decir que sea mala. Simplemente, hay que verla con cuidado... y tener imaginación para rellenar los huecos de guión.

-- Rita Hayworth. Alguna vez ella dijo que "los hombres se enamoran de Gilda, pero se despiertan conmigo", aludiendo a su rol en "Gilda", precisamente, que la lanzó a la fama. En esta peli, su cabellera rubia está reemplazada por un corto pelirrojo, medida que irritó al estudio (sí, vaya manera de valorar el talento actoral), y parece ser ayudó a la pobre recaudación que la peli tuvo en su minuto (ya ven, Keri Russell no fue la primera). Pero la Hayworth está impecable como femme fatale, detalles pilosos aparte.

-- Hagamos mención de Orson Welles. Su talento como director no luce tan bien acá como en "Ciudadano Kane", básicamente por el despiadado descerraje de los editores (en esa época, los editores trabajaban para el productor, no para el director), pero a ratos, hay destellos de lo grande que podría haber sido esta peli si le hubieran dejado hacerla a su manera.

-- La famosa secuencia final (SPOILEREO EL FINAL A CONTINUACIÓN, ¿VALE?). Muchos cineastas han citado esta escena una y otra vez, con la juiciosa opción de hacer caso omiso del resto de la peli. Sé que la han visto, hagan memoria: el prota, la mujer fatal y el villano están en un salón de espejos, y empiezan a dispararse unos a otros. Muy metafórico todo. Y el diálogo final es simplemente escalofriante, incluso para los estándares actuales. Este gran final redime mucho de los vicios de una peli que, como decíamos, hay que armarse de paciencia para ver.

IDEAL PARA: Ver una peli con estatus de clásica por una sola escena (sucede más de lo que uno cree), pero que compensa con creces el resto del metraje.

ENLACES.

-- (Ir a la página). Artículo de la peli en Wikipedia (en inglés).
-- (Ir a la página). Artículo en IMDb.
-- (Ir a la página). Artículo en El Criticón.
-- (Ir a la página). Artículo en Blogdecine.
-- (Ir a la página). Esta peli en FilmAffinity.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [En inglés, sin subtítulos].



-- Rita Hayworth en trajebaño, tratando de seducir a Orson Welles [En inglés, sin subtítulos].



-- Rita Hayworth cantando "Please, Don't Kiss Me" en bikini... O lo que en esa época se consideraba como tal. Esta escena fue rodada a pedido del estudio, y no le añade mucho a la peli en sí, pero luce más que bien a la Hayworth [En inglés, sin subtítulos].



-- SPOILER GRANDE: La famosísima secuencia final en el salón de espejos, y el aftermath. Considérese que Welles y la Hayworth en esa época estaban casi al borde del divorcio. Después se divorciaron, de hecho [En inglés, sin subtítulos].



jueves, 18 de diciembre de 2008

ENCUESTA CINE 9009: ¿Cuáles son las mejores entregas de James Bond?

Durante Noviembre, la pregunta abierta a nuestros lectores fue la siguiente: "¿Cuáles son las mejores entregas de James Bond?" Votaron 13 personas en total, pudiendo optar por varias alternativas distintas al mismo tiempo. Los resultados fueron:

-- "Doctor No" (1962) - 1 voto (7%)
-- "Desde Rusia con amor" (1963) - 2 votos (15%)
-- "Goldfinger" (1964) - 2 votos (15%)
-- "Operación Trueno" (1965) - 2 votos (15%)
-- "Sólo se vive dos veces" (1967)- 3 votos (23%)
-- "007 al Servicio Secreto de Su Majestad" (1969) - 2 votos (15%)
-- "Los diamantes son eternos" (1971) - 2 votos (15%)
-- "Vive y deja morir" (1973) - 2 votos (15%)
-- "El hombre de la pistola de oro" (1974) - 3 votos (23%)
-- "La espía que me amó" (1977) - 4 votos (30%)
-- "Moonraker" (1979) - 3 votos (23%)
-- "Sólo para tus ojos" (1981) - 1 voto (7%)
-- "Nunca digas nunca jamás" (1983) - 0 votos (0%)
-- "Octopussy" (1983) - 2 votos (15%)
-- "En la mira de los asesinos" (1985) - 1 voto (7%)
-- "Su nombre es peligro" (1987) - 2 votos (15%)
-- "Licencia para matar" (1989) - 3 votos (23%)
-- "Goldeneye" (1995) - 0 votos (0%)
--
"El mañana nunca muere" (1997) - 1 voto (7%)
-- "El mundo no es suficiente" (1999) - 1 voto (7%)
-- "Otro día para morir" (2002) - 4 votos (30%)
-- "Casino Real" (2006) - 5 votos (38%)
-- "Quantum of Solace" (2008) - 1 voto (7%)
-- No hinches, son todas lo mismo (de malas) - 1 voto (7%)

¿Ganadora absoluta? "Casino Real" (5 votos), seguida por "La espía que me amó" y "Otro día para morir" con cuatro votos cada una. La opción antiBond se llevó apenas 1 voto... Aunque más de los que votaron por "Nunca digas nunca jamás" o "Goldeneye", que nadie votó por ellas.

En total, se emitieron 47 votos por las películas. Dividido entre 12 votantes (descontando uno porque suponemos que votó por la opción residual antiBond y no ADEMáS por alguna peli, ¿no?), suman 3,9 votos por votante. O sea, cada espectador de peli Bond encuentra que casi cuatro pelis de la saga son meritorias por sobre la media al menos.

Además, 47 votos en 22 pelis hacen una media de 2,1, así es que suponemos que las pelis que superen esa media son las "pelis Bond buenas". ¿Y cuáles son éstas? Las siete siguientes: "Sólo se vive dos veces", "El hombre de la pistola de oro" (¡¡!!), "La espía que me amó", "Moonraker", "Licencia para matar", "Otro día para morir" y "Casino Real"...

¿Opiniones a favor, en contra? No se olviden de comentar...

domingo, 14 de diciembre de 2008

"Vamos a la Luna" (2008).


-- "Fly Me to the Moon". Bélgica. Año 2008.
-- Dirección: Ben Stassen.
-- Actuación (voces en idioma original): Tim Curry, Robert Patrick, Kelly Ripa, Buzz Aldrin, Trevor Gagnon, Philip Bolden, Nicollette Sheridan, Ed Begley Jr., David Gore, Christopher Lloyd, Adrienne Barbeau.
-- Guión: Domonic Paris.
-- Banda Sonora: Ramin Djawadi.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Año 1969. El dominio absoluto de la Tierra está repartido entre dos especies inteligentes: los seres humanos por un lado, que fabrican chismes y artefactos divertidos, y las moscas, que se meten en los intersticios del sistema y medran del magín humano (así, pues, ¿quién es más inteligente...?). Pero eso no basta para un trío inquieto de moscas, un chico aventurero que quiere vivir su gran aventura (contradictio in terminis, claro, ser aventurero sin aventura, pero en fin, así es como es...), un cerebrejo con patas que lo dice todo en clave científica, y un glotón que lo único que hace es glotonear, lo repito para dejar bien puesto el tema. Los tres son jovencitos entusiasmados por esas cosas de adolescentes bien de los '60s (ya saben: la carrera espacial, "La Tierra y sus recursos", las láminas de Mundicrom...), pero llegan los adolescentes más más, que les espetan en cara directamente que son unas larvas, que ellos ya están en lo de ligue de chicas, y nuestros amiguis, bueno... Feel pity for you, kids. Todo hubiera quedado ahí, de no ser por dos cosas: 1.- El abuelo del aventurero es otro aventurero (viene de genética, ni que fueran Drosophilas...) que una vez le salvó el duro y bien torneado trasero a Amelia Earhart... mmmmmm... Ameeeeeel... perdon, no debería hablar con el micrófono abierto. Bien, el abuelo tiene genes aventureros y se los ha transmitido a su nieto. Y 2.- El próximo martes despega un cohete que llevará a tres valientes astronautas humanos... ¡A la Luna! Comienza así entonces la operación destinada a transportar los primeros seis terrícolas a la Luna. ¿Seis, dije? Sí, seis dije: los humanos Armstrong, Aldrin y Collins por un lado, y el trío de moscas protas... Pero antes de dar un pequeño paso para el hombre y un gran mosqueo para la Humanidad, habrán de superar los obstáculos de rigor, incluyendo un grrrupo de perrrverrrsas moscas tovarrrich que, detrrrás de la Corrrtina de Hierrro, complotan parrra que la misión de los adláterrres del imperrrialismo capitalista frrracase... ¿Conseguirán nuestras tres moscas, ser LAS PRIMERAS MOSCAS EN LA LUNA?

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Lo que faltaba. H.G. Wells escribió en sus tiempos veterocienciaficcionísticos una novela que era "Los primeros hombres en la Luna" (1901). Luego, Fritz Lang rodó "La primera mujer en la Luna" (1929). Y ahora llega la peli sobre... Las primeras moscas en la Luna. Quizás algún día rueden algo sobre las primeras Rickettsias en la Luna, vaya uno a saber. El caso es que "Vamos a la Luna", la primera peli sobre las primeras moscas en la Luna, es también la primera peli en el nuevo chupisistema animación 3-D. Pero como su seguro servidor la vio en la clásica pantalla 2-D de toda la vida y no tiene ganas de gastarse un pastón, considerando que las pelis valen mitad por los FXs y mitad por la historia, la trama y los personajes, pues qué más da, la vemos y le asignamos una ponderación de 50% (o más). ¿Y qué es lo que vio su seguro servidor el General Gato? Bueno, vamos al siguiente apartado...

¿POR QUÉ VERLA?

-- Frente a las feroces críticas que se ha ganado esta peli, debo decir lo siguiente, y lo diré en mayúsculas para que quede claro: ESTA ES UNA PELI PARA NIÑOS. ¿Entendimos? Y con esto, no quiero denostarla ni mucho menos. Simplemente quiero decir que esta peli proclama desde el comienzo y sin complejos que no se esperen nada demasiado denso aquí. Existe una tendencia esnobista a considerar las cosas de niños como ¡BAH! para cabros chicos (¿perrrrrrdón...?). Y no tiene por qué ser así. Debe haber una parcela para el entretenimiento adulto, con cerveza y chicas de cositas al aire, y otra parcela para el entretenimiento infantil, no porque debamos abrir campos de concentración para la infancia (aunque como algunos infantes tiran nuestras colitas de gato, sí que se lo merecen... O deberían reforzar el cerco de seguridad en los Kindergarten, tanto más da), sino porque el entendimiento y las necesidades cognoscitivas de los niños son distintas a la de los adultos. Uno de los grandes daños que le hizo "Shrek" a todo el cine infantil del 2000, es convencer a la audiencia de que las pelis para niños en realidad debían ser grandes y profundas, y que estuvieran más dirigidas al público adulto que al infantil con sus chistes metarreferenciales y sus alusiones simpsonescas (no es una crítica contra "Shrek", peli estupenda por donde se la mire, sino contra los payasos que la vieron y dijeron que ahora todas las vamos a producir al estilo Shrek). En esta peli no hay chistes metarreferenciales dirigidos a los adultos ni nada de eso. Es aventura infantil pura y dura, la de toda la vida, y punto. Lo que está bien, porque nada en la peli chirría. Claro que si no puedes retroceder a tu mejor infancia... Vas a entrenar estupendamente en el arte de bostezar viendo esto. Pero si suspendes tu adultez por un par de horitas, la podrás gozar como lo que es, un divertimento infantil en toda regla.

-- La trama de la peli es simple, pero relativamente eficaz, siempre dentro de los cánones de la aventura para niños. Los tres protas son niños (obvio), que quieren vivir su gran aventura, y la viven. No más que eso. Pero tampoco menos que eso. La peli explota bien el tema de lo maravilloso de la aventura, del descubrimiento del mundo, y por qué no decirlo, del ponerse a prueba a sí mismos y superarse, del rito de pasaje desde la niñez a la adolescencia, incluyendo esos adultos aguafiestas que están ahí para decir que no deberías soñar, y ese abuelo vejete que alguna vez fue joven y entiende por eso el afán de aventura de los chicos... El grupo es condimentado por un grupo de malos malosos que obliga a poner un poco a prueba la paciencia, eso sí (¿moscas rusas saboteando la carrera espacial yanki? Un poco mucho incluso para los estándares de una peli infantil, ehm...), pero en las secuencias de pura aventura tenemos el sentido de lo maravilloso a cien.

-- Mención aparte merece también cómo se consigue lo maravilloso. No se trata de brujas ni cuentos de hadas, ni de lejanos sistemas estelares gobernados por princesas cabezacachirulos, sino de algo tan terrestre como la misión Apolo XI. O sea, disparándose en el propio pie porque no pueden mostrar nada más que la tecnología atompunk de la época. Y qué creen. Funciona. Hay un grandioso sentido de la épica en algo tan The History Channel como la carrera espacial (apoyado por un buen soundtrack, hemos de decirlo). Escenas como el despegue del Apolo XI hacia la Luna, como las labores de acoplamiento y desacoplamiento de los distintos módulos y fases de la nave, la entrada y salida de órbita, por no hablar del instante propiamente lunar, son sentido de la maravilla pura, y redime mucho de los rasgos más infantiloides de la peli (ahora sí infantiloides en el mal sentido, y es que esas moscas tovarich... lo siento, aún no lo trago). Claro que no hay suspenso porque sabemos que la misión Apolo XI sí regresó a la Tierra, pero es que oigan, como decíamos ésta es una peli para niños, y por ende ellos, que a duras penas saben todavía algo de Historia (y así como van las cosas, quizás nunca lleguen a saber tampoco, más interesados en el listado de vueladientes de Dragonball Z que en los jenízaros de Solimán el Magnífico), sí puede que se pregunten si los esforzados astronautas o moscanautas regresarán a la Tierra... Pero como decía, las escenas precedentes explotan toda la iconografía transistorpunk de la carrera espacial a cien.

IDEAL PARA: Ver una peli para niños, es cierto, y bien para niños, también es cierto, pero que consigue ese sentido de la maravilla que la mayor parte de los adultos tiene la mala costumbre de perder por el camino.

ENLACES.

-- (Ir a la página) Entrada en IMDb.
-- (Ir a la página) Artículo de la Wikipedia en inglés.
-- (Ir a la página) Comentario en El Bazar del Espectáculo.
-- (Ir a la página) Comentario en Pochoclos.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [doblado al español].



-- Trailer de la peli [en inglés, sin subtítulos].



jueves, 11 de diciembre de 2008

"Eragon" (2006).


-- "Eragon". Estados Unidos. Año 2006.
-- Dirección: Stefen Fangmeier.
-- Actuación: Ed Speleers, Jeremy Irons, Sienna Guillory, Robert Carlyle, John Malkovich, Garrett Hedlund, Alun Armstrong, Christopher Egan, Gary Lewis, Djimon Hounsou, Rachel Weisz (voz), Richard Rifkin, Steve Speirs, Joss Stone.
-- Guión: Peter Buchman, basado en la novela de Christopher Paolini.
-- Banda Sonora: Patrick Doyle.

¿DE QUÉ SE TRATA?

El Reino de Alagaësia era grande, próspero, lindo, feliz, blahblahblah, hasta que el malvado Galbatorix decide que está muy anárquico el asunto, además de que el asunto no es muy democrático porque resulta que en el Gobierno están representadas las fuerzas de la luz y no las de la sombra, así es que decide equilibrar la balanza imponiendo un coup d'état. La Orden de los Jinetes de Dragones, que se habían autonombrado los garantes últimos de la seguridad ciudadana, fueron convenientemente barridos, y las instituciones empezaron a funcionar de verdad, reclutando campesinos demasiado liberales para el muy noble propósito de servir en las fuerzas de paz y orden. ¿Acaso toda esperanza está perdida para el Ala Izquierda de Alagaësia? ¡No! Porque resulta que a las manos de un campesino cualquiera, un Luke Skywalker medievalpunk llamado Eragon, va a dar una misteriosa roca azul. El otro se quiebra la cabeza una y otra vez pensando que es, hasta que finalmente se rinde diciendo "¡por un huevo...!", y el huevo, que eso era, nace, y Eragon queda entonces de muy inteligente porque adivinó que el huevo era efectivamente un huevo. Con lo que la vida empieza a hacérsele difícil, porque verán, el huevo era de dragón, de dragona mejor dicho, y la dragona eligió a Eragon por ser humilde, bueno, puro, blahblahblah. Ahora Eragon, quieras que no, debe cabalgar al dragón y transformarse en el defensor de la Orden de los Jinetes de Dragones en Alagaësia, porque fue elegido, caramba, aunque nadie le preguntó (lo dicho, estos tipos de los dragones no son unos demócratas precisamente). Eragon se pone entonces a las órdenes de un tipo llamado Brom, un antiguo guerrero que de buena gana le pondría el puño bajo la mandíbula a Galbatorix, pero las cosas no van a ser tan sencillas. Porque Galbatorix se ha dado cuenta de que el terrorismo dragonil ha levantado cabeza otra vez, y envía a sus propias fuerzas de orden y seguridad para destruir el foco de resistencia a la autoridad. La cacería ha comenzado, y Eragon deberá no digamos combatir por Alagaësia, sino simplemente mantenerse con vida contra los malvados agentes de Galbatorix.

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Dicen que la historia fue así, y así es como la repetiré. Había una vez, en uno de esos andurriales semiperdidos de la América Profunda, un chico que se las dio de genio y salió de la Secundaria a los quince años. Christopher Paolini entonces dióse en creer por ciertas aquellas leyendas según las cuales era muy majo y muy inteligente, y en vez de entrar a la universidad y transformarse en alguien productivo para la sociedad, se botó a escritor. Parece ser que creyó que ser inteligente es más que suficiente, y ¡ups! olvidó o no quiso ver el casi insignificante detalle de que para escribir una historia novedosa y creativa, primero debes tener una sólida cultura por detrás que te permita disponer de muchos elementos en tu cabecita, que al mezclarlos te permita hacer el horus pocus de crear una historia nueva. Lo único que el señor Paolini parece haber tenido en su cabeza, aparte de chorlitos saltarines, es Star Wars y "El Señor de los Anillos". En esas condiciones, su novela "original" iba a ser simplemente Star Wars en ambientación medieval, o por el contrario, ESDLA en ambientación cienciaficcionera o pulpesca (y no es que entre ESDLA y SW haya tanta diferencia, que después de todo ambas se tratan del héroe pequeño campesino elegido para una gran misión que consigue derrotar a todo un imperio de oscuros y negros malvados totalitarios tecnócratas restaurando el dominio de los antiguos aristócratas que gobernaron siempre, fueron temporalmente derrocados, y vuelven por sus fueros a lo que siempre ha sido y siempre será). En plena fiebre por "El Señor de los Anillos", ahora la peli, resulta que su novelita cayó en gracia a los editores, se vendió como pan caliente entre los jovenzuelos que piensan que la vida se agota en las cuatro esquinas de los elfos, los enanos, los trasgos y los guerreros con espada Fuerza+4, y se compraron los derechos para rodar la peli. Pobres. Creyeron que la hacían de oro. El batatazo fue tan grande, que 20th Century Fox (sí, la misma que distribuyó "La guerra de las galaxias", y que andaba verde, como todos los otros estudios de la época, por tener su propio "Señor de los Anillos" que tanto bien le había hecho a New Line Cinema) dijo donde digo "digo" digo Diego, y de la secuela prometida nunca más se habló. Una lástima. Aunque no lo crean, esta cosa daba de sí, al final del día. Más o menos. Menos agua da una piedra, en todo caso. U otras pelis igualmente malas, pero muy recomendadas por la parroquia (lo dicho, cuando eres un imberbe de quince años crees que lo sabes todo, y después -a veces- te pones a leer y descubres que no).

¿POR QUÉ VERLA?

-- Veamos. En su tiempo, cuando la estrenaron en cines, esta peli fue literalmente hecha pedazos por la crítica. Lo más suave que le dijeron, fue ser un clónico de Star Wars o "El Señor de los Anillos". De serlo, lo es. Pero, ¿es eso tan grave? Después de todo, cualquier medio enterado sabe que ambas son a su vez refritos de historias más antiguas, y así, remontando la cadena de oro, podemos llegar hasta los antiguos mitos griegos, la Biblia, etcétera. El esquema es el siguiente: 1.- Mundo bonito amenazado por fuerzas oscuras, 2.- La única esperanza es el poca cosa al que nadie había visto antes, 3.- El poca cosa se ve envuelto por accidente en la historia y descubre que "es más" (elemento indispensable para conseguir la identificación de un lector/espectador necesitado de escapismo e incapacidad para construirse una vida a medida, teniéndola por tanto en forma vicaria por estos héroes), 4.- El poca cosa es entrenado por un maestro y deja de ser poca cosa para transformarse en un héroe, 5.- El maestro desaparece a un costado (o es muerto, o tiene otras tareas que atender) y el héroe queda solo en la hora más oscura, 6.- Después de lo cual lidia contra el Mal y obtiene un resonante triunfo que asegura una vez más el mundo para el bien y la luz y etcétera. "Eragon" sigue este esquema por el manual, al igual que en su tiempo lo hicieron Tolkien y Lucas, ¿qué hay de malo con esto? Otra cosa es, por supuesto, hacerlo con una creatividad bajo mínimos. Los diálogos de la peli son malos, las actuaciones son caricaturescas, y pecado más imperdonable, el villano si bien infunde cierto respeto (es que son John Malkovich y Robert Carlyle, y algo hacen estos dos, o no serían quienes son) no infunde miedo, y para colmo en el lado de los buenos, a pesar de ser Ed Speelers un héroe pasable (que no bueno, pero en fin...), a su lado la anoréxica y desangelada Sienna Gillory ("La máquina del tiempo", "Resident Evil: Apocalipsis", ¡"Alianza siniestra"!) es un miscasting absoluto. Pero, ¿sería la primera vez que vemos un desastre así? Creo que no. Pero por otra parte, había un tema de expectativas. Cuando estrenaron "Eragon" en los cines, lo hicieron como the next best thing, el gran blockbuster que continuaba la legendaria tradición de "El Señor de los Anillos" o poco menos. Y a ese nivel, esta peli no funciona. Pero si lo vemos como el piloto de una serie televisiva jamás rodada (incluyendo esa escena final con un enorme "¡¡¡CHACHAAAAAÁN...!!!") o como una de esas producciones serie B de Sci-Fi Channel, está bien. Como entretenimiento de matineé para niños debería funcionar. Es cierto que alguien quien haya visto "La guerra de las galaxias" difícilmente encontrará algo defendible en "Eragon" (lo dicho, es una copia casi al carbónico), pero por otra parte, "La guerra de las galaxias" era también una copia al carbónico de las seriales dominicales antiguas sobre Flash Gordon. Cada generación necesita que le cuenten el cuento de nuevo, o no habrían nuevas sagas siguiendo exactamente el mismo patrón. No digo que "Eragon" sea una buena peli. Digo simplemente que en un futuro, podrá ser un entretenimiento menor para los niños. Lo que no es poco, al final del día. Claro que si ya no eres un niño y aún así te entusiasmas por ver esta peli, pues bien, ahí ya no respondo...

IDEAL PARA: Entretener a un niño pequeño, lleno de magia e ilusión.

ENLACES.

-- (Ir a la página) Página oficial de la peli en español.
-- (Ir a la página) Entrada en IMDb.
-- (Ir a la página) Artículo de la Wikipedia en inglés.
-- (Ir a la página) Comentario en La Higuera.
-- (Ir a la página) Comentario en El Elixir.
-- (Ir a la página) Comentario en El Blog Sin Nombre.
-- (Ir a la página) Comentario en Historias e Historietas.
-- (Ir a la página) Comentario en El Cultural.
-- (Ir a la página) Comentario en La Ley del Menor Esfuerzo.
-- (Ir a la página) Comentario en El Zoco de Lakkmanda.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [doblado al español de Ezpañah].



-- Trailer de la peli [en inglés, sin subtítulos].


domingo, 7 de diciembre de 2008

"24: Redención" (2008).


-- "24: Redemption". Estados Unidos. Año 2008.
-- Dirección: Jon Cassar.
-- Actuación: Kiefer Sutherland, Cherry Jones, Bob Gunton, Colm Feore, Powers Boothe, Robert Carlyle, Peter MacNicol, Gil Bellows, Hakeem Kae-Kazim, Isaach De Bankolé, Kris Lemche, Eric Lively, James Joseph O'Neil, Carly Pope, Sebastian Roché, Jon Voight.
-- Guión: Howard Gordon, basado en el programa de televisión creado por Joel Surnow y Robert Cochran.
-- Banda Sonora: Sean Callery.

-- "24: Redención" en IMDb.
-- "24: Redención" en la Wikipedia en inglés.

EL SIGUIENTE COMENTARIO TIENE LUGAR ENTRE EL INICIO DE ESTE POSTEO, Y EL FINAL DE ESTE POSTEO.

¿DE QUÉ SE TRATA?

En un movimiento paleontológico ante la baja de rating de la serie de TV, Jack Bauer ha regresado a la Cuna de la Humanidad, a Africa, lugar en que se encuentra ayudando a un antiguo compañero de Special Ops que ha montado una escuelita nada más chula para darle educación a esos pobres africanitos, y que no se maten entre sí. (Lo repetiré de nuevo por si no se entendió el concepto: el sádico y sanguinario agente de CTU se encuentra con un antiguo compañero de Fuerzas Especiales, para una misión humanitaria... Casi como Arnold Schwarzennegger en ésa de volver al Kindergarten o como se llame). Mientras tanto, en Estados Unidos, es día de cambio de mando y asumirá la primera mujer Presidente de los Estados Unidos (primero el negro y algún día la mujer, así fue en "24" y así pasó en el mundo real también). Todo sería un día como cualquiera otro de cambio de mando, pero de pronto un malvadísimo genocida africano (cuando son africanos son genocidas, cuando son estadounidenses se llama Justicia Infinita) decide que ya está bueno de seguirle regalando el país de Sangala a los occidentales, que Africa para los africanos, y con armas compradas bajo cuerda a un vejete con cara de rottweiler en los Yueséi (Jon Voight, haciendo de malo por enésima vez) están listos para dar un golpe de estado. La noticia golpea de distintas maneras. En Estados Unidos, la nueva Presidenta quiere hacer algo sobre Sangala, porque es buena e idealista (en Sangala no hay petróleo, entendámonos, así es que el otro Presi, el que habíamos visto en la temporada 6 de "24", no está ni remotamente interesado en enviar a Sangala una misión humanitaria de "ametrallar en nombre de la democracia"). En Sangala mismo... los niños de la escuelita de los Special Ops están amenazados. Qué desgracia. Para los malvados guerrilleros reclutaniños, por supuesto. Creen que Chuck Norris se jubiló y con eso tienen carta blanca para todo, y no saben que tienen a Jack Bauer al frente. ¿Acaso no saben que los hechos de Chuck Norris son perfectamente aplicables a Jack Bauer, y además hay algunos hechos de Jack Bauer que no son aplicables a Chuck Norris? No, no lo saben. Si lo supieran, no se atreverían a nada, y no habría peli. Pero se atreven. Y hay peli. Y dura hora y media sin comerciales, a pesar de que "the following takes place between 3:00 PM and 5:00 PM".

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

La historia es conocida, pero como imperioso es dejar constancia para las futuras generaciones, acá va. "24" se transformó en una de las series más icónicas del 2000s, con su aroma facha y su "me cago en los putos derechos humanos". Como dijo alguna vez Bob Patiño, dentro de cada demócrata hay un republicano de corazón duro y frío. "24" es la representación máxima de las contradicciones vitales (¿cómo me quedó eso?) de la Era Bush, de la búsqueda y defensa de la libertad y la democracia por los métodos más dictatoriales y antidemocráticos posibles. Pero una serie tan over-the-top como "24" no podía mantenerse demasiado sin que en algún minuto viniera la presión de tener que enfundar a Jack Bauer en un traje de astronauta y enviarlo al espacio exterior para hacer el más chulo todavía, y de eso se resintió gravemente la sexta y penosísima temporada de la serie (los cuatro primeros capítulos, hasta que revienta el tomate nuclear, estupendos, pero el resto son 20 horas de suplicio chino... con chinos incluidos para asegurarse de que el suplicio sea bien chino). Para colmo, cuando estaban pensando en cómo salvar al Bauer de los huevos de oro, viene la maldita huelga de guionistas, y "24" a freir espárragos un año completo. Pero los productores, ni cortos ni perezosos, hicieron de necesidad virtud, y ya que no habrá temporada de "24" el 2008, pues bien, hacemos la peli, mantenemos a "24" en el nivel de supervivencia, y todo arreglado para revamp la serie en la temporada siete ("It's impossible... Tony Almeida is dead..."). Así es que acá tenemos la peli de "24". Made-for-TV. O algo así. (Seamos honestos: la vendieron como la peli de "24", pero en realidad no pasa de ser un episodio larga duración, la dirige Jon Cassar que se ha dirigido como 50 capítulos de la serie, la musicaliza el mismo Sean Callery que creó el molon tema televisivo, y conserva el formato y estética, pero debido al marketing de "la peli de 24", podemos colgarnos de eso y comentarla como peli en Cine 9009... Qué astuto soy, hehehé).

¿POR QUÉ VERLA?

-- La cuestión más interesante es que esta peli está basada en una serie de TV que todavía no termina. Como "Expediente X: Combate al futuro", pero en pobre. Por tanto debe apelar a dos públicos, el de la serie (espumeando rabia por la cretinez superlativa de la sexta temporada) y el de potenciales nuevos reclutas que quisieran incorporarse a la séptima temporada (pero, en estos tiempos de barackobamismo progre, ¿habrá quién quiera seguir las aventuras de nuestro simpático y facha agente de CTU?). Y cumple con ambos, quizás no con creces, pero al menos con corrección. Para los fanáticos, conserva el esquema y formato de real time, "the following takes place between 3:00 PM and 5:00 PM", además de presentar a un par de personajes de la sexta temporada merodeando por ahí en tercera fila para asegurar un espejismo de continuidad, y además deja sembradas las semillas para la séptima temporada. Para los outsiders, presenta una historia más o menos autocontenida (más menos que más), sencilla y eficaz: Jack Bauer cepillándose golpistas en Africa. O casi, porque toda la subtrama del cambio de mando en Estados Unidos no encaja para nada con las peripecias de Jack Bauer en Africa, y en los hechos, no queda resuelta en lo absoluto (a esperar por la séptima temporada, pequeñuelos...). Pero en lo de Africa está bien, particularmente porque los que nunca han visto la serie no tendrán que mamarse seis temporadas para entender qué está pasando en la peli, y eso se agradece (al revés de "Expediente X: Combate al futuro", que si no habías visto hasta las versiones alternativas de cada temporada en DVD podías olvidarte de entender qué demonios pintaba cada cosa).

-- El cambio de escenario le hace bien a la franquicia de "24" como un todo y contribuye a incrementar su universo narrativo. Ahora ya no es Los Angeles, sino la jungla africana, y es un respiro ver a Jack Bauer corriendo por allá afuera. Los malos malosos ya no son "ellos quienes caminan entre nosotros", sino villanos de afuera a secas, y eso también es otro respiro. Todo lo cual contribuye a que esta peli tenga un aire a Chuck Norris que no se lo puede quitar. Lo que no está mal, por supuesto. Claro que hay niñatos de por medio, incluyendo el insufrible niño tierno que está ahí para meter la pata cada cinco segundos y por lo tanto deseamos que muera (error: es el niño "tierno" y "adorable", así es que se mantendrá vivo hasta el final, maldito bastardo), pero en general esto no llega a pesar tanto en la trama que la hunda por completo. Vemos a Jack Bauer matando negros, y al final tenemos un elemento que la serie "24" había explotado con eficiencia, en sus buenas temporadas al menos, cual es obligar a Jack Bauer a tomar una dura decisión moral que lo define por completo como personaje (y van...). Es, por lo tanto, una aceptable peli de acción, en lo que a la parte africana se refiere (toda la sección del cambio de mando, como decíamos, en realidad sale sobrando).

-- Robert Carlyle. A veces grandioso, a veces insufrible (todavía tenemos que meternos colirio a los ojos para olvidarnos su penoso paso por "El mundo no es suficiente"), Carlyle está grande aquí como el compañero de Bauer que mantiene su escuelita. Su preocupación por los chicos se ve genuina, y consigue darle algunos matices a un personaje que sobre el papel, como buena peli de acción que se precie de tal, es plano como una planaria (chiste fácil, ya lo sé, pero me hago entender por lo gráfico). Mencionemos también la aparición de Gil Bellows, idos ya sus días de guarro echándole los tiros a Ally McBeal o comiéndose a Mia Sara, ahora como un seco funcionario del Gobierno que no hace mucho para ser detestable, y sin embargo consigue hacerse aborrecible.

IDEAL PARA: Fundamentalmente, fanáticos de la serie. O quienes echen de menos un poco de acción a lo Chuck Norris.

OTRAS PÁGINAS SOBRE "24: REDENCIÓN".

-- (Ir a la página) Comentario en Es La Tele.
-- (Ir a la página) Comentario en Series Adictos.
-- (Ir a la página) Comentario en La Bitácora del Capitán.
-- (Ir a la página) Comentario en La Batcueva.
-- (Ir a la página) Comentario en La Escotilla.

VIDEOS.

-- Trailer del episodio de larga durrrrrr... er... quiero decir, de la peli [en inglés, subtítulos en español].

jueves, 4 de diciembre de 2008

"Arenas blancas" (1992).


-- "White Sands". Estados Unidos. Año 1992.
-- Dirección: Roger Donaldson.
-- Actuación: Willem Dafoe, Mary Elizabeth Mastrantonio, Mickey Rourke, Samuel L. Jackson, M. Emmet Walsh, James Rebhorn, Maura Tierney, Beth Grant, Alexander Nicksay, Fredrick Lopez, Miguel Sandoval, John Lafayette, Ken Thorley, Jack Kehler, Royce D. Applegate.
-- Guión: Daniel Pyne.
-- Banda Sonora: Patrick O'Hearn.

-- "Arenas blancas" en IMDb.
-- "Arenas blancas" en la Wikipedia en inglés.

¿DE QUÉ SE TRATA?

El sheriff de uno de esos poblachos redneck de mierda en la America Profunda, se encuentra un día con una sorpresita. Tiene, en pleno desierto, un cuerpo tirado, muerto con herida a bala, y con maletín de 500.000 dólares. Al sheriff el asunto le pica la guía, decide no archivar la investigación por falta de antecedentes y se las rebusca hasta descubrir un número telefónico de contacto. A través del teléfono se hace pasar por el muertito, y ¡UPS!, le creen. Le dicen que vaya a tal parte, que se hospede en tal lugar, y que la cita es a tal hora. El sheriff se prepara entonces para emprender un largo viaje, se despide de su amante familia (la siempre bustosa Mimi Rogers, en esos años recobrándose del chancacazo que Tom Cruise le dio con Nicole Kidman, y en esta peli sin acreditar), y emprende el viaje hacia su destino. En el lugar es atacado por un par de ninjas lesbianas (no pregunten, la peli venía así, además que no vuelven a aparecer...), que le roban el dinero y lo dejan en paños menores. Pero le dicen que su verdadero contacto está en tal otro lugar. Bien, al menos ya estamos llegando a alguna parte. O casi. Porque antes de eso es atacado de nuevo y llevado hasta un cuartel, en donde descubre que sus atacantes son el FBI. "Mira, desgraciao, teníamos un operativo, y lo acabas de joder, y acabas de pasarle 500 de los grandes al enemigo, ¿captas?". El sheriff se las arregla entonces para convencerlos de seguir el arreglo, que a él no lo conocen, que piensan que es el muertito, así es que seguirá trabajando undercover. Los agentes del FBI se miran y remiran el asunto, y finalmente aceptan el trato. El sheriff irá entonces recto a encontrarse con su destino. Aunque el camino sea muy torcido y retorcido, porque como de costumbre, nadie es quien dice ser, todos engañan, etcétera.

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Aunque ustedes no lo crean, mis estimados humanitos, hubo una época en que el cine de Hollywood se preocupaba por hacer pelis inteligentes. No significa que TODAS las pelis fueran inteligentes, pero había una cantidad significativa de ellas con buenos guiones y tramas de cierta elaboración. Uno de los géneros más beneficiados por esto, y hoy en día bastante caído en desgracia (cuestión de ver cosas como "El centinela" o "Justo en la mira"), es el thriller de suspenso policíaco. Se suponía que el cine antes iba dirigido al público adulto, y el público infantil tenía su propio lugar claramente segmentado... y las pelis juveniles buscaban entregar ideas (¡cuántas de Ciencia Ficción de serie B, despreciadas por la alta crítica y destrozadas por los culturetas de toda la vida, no lidiaron con temas como el racismo, el clasismo, la xenofobia, el miedo a lo diferente...!). En los '80s, eso empezó a cambiar: "La guerra de las galaxias" y los blockbusters subsiguientes enseñaron que entre los adolescentes descerebrados estaba el dinero, y mientras más descerebrados mejor, que así menos le pagamos a los guionistas (ejemplo célebre: el mono que después de 1000 intentos aporreando una máquina de escribir todavía trata de sacar las obras completas de Shakespeare, y que por el momento ha conseguido tan solo escribir los guiones de Michael Bay). "Arenas blancas" en ese sentido es una especie de canto de cisne, una peli de suspenso "a la antigua", que si bien no es perfecta ni de lejos, al menos trata de ofrecer una trama esforzada y un suspenso aceptablemente bueno, que se base en los conflictos de personajes e intereses, y no en la predecible imprevisible vuelta de tuerca cada cinco segundos para mantener a pulso la trama. En su tiempo, la crítica la trató con bastante displiscencia. Claro, podían saber lo que se estaba avalanchando sobre el cine comercial: aún no habían visto nada de Michael Bay.

¿POR QUÉ VERLA?

-- Es un estupendo thriller policíaco. Se basa en la materia prima del cine de toda la vida, o sea, en el suspenso y en la colisión de intereses creados entre distintos personajes, no en lo espectacular de la acción ni la chulería de los protas. De hecho, las escenas de violencia tienden a ser más bien pocas y dosificadas, y estamos en una época anterior a la cual los protas tenían que salir haciendo el Mátrix. El guión tiene sus momentos WTF, vale (esas ninjas lesbianas), y algunas cosas no quedan del todo claras. Pero hay un aire como a que toda la trama criminal en verdad no importa tanto al final del día. Utiliza también notablemente la idea del prota de inocencia relativa metiéndose a un infierno reglado con leyes que no conoce (idea también utilizada en "Terciopelo azul" con más inteligencia, pero es que allá era David Lynch, y acá es claramente un producto comercial), con una gran escena en que el prota Willem Dafoe se despide de su esposa (y al poco rato se encontrará con otra chica con la que podría estar la mar de bien... o no...). Y el final, que por supuesto no adelantaré, tiene un regusto al mejor Western de toda la vida, ése en donde los espacios amplios, desolados, infinitos, blah blah blah, se transforman en casi parte de los protas... Con debilidades y todo, sigue siendo un estupendo thriller. El guión es responsabilidad de Daniel Pyne, que ese día parece que estaba escribiendo iluminado, porque no ha tenido otra historia tan interesante entre sus manos (ha sido guionista también de "Doctor Hollywood", "Un domingo cualquiera", "La suma de todos los miedos"... pero ésa no cuenta porque estaba adaptando una novela... el remake de "El candidato del miedo"...). Y el director es Roger Donaldson, que tiene su nombrecito ganado en el cine popcornero con cosas como "Cóctel", "Especies", "El discípulo", y el notable thriller político "Trece días".

-- Las actuaciones están notablemente bien. El protagonismo recae sobre Willem Dafoe, una adecuada elección para un personaje un poco en la vena de Cogan, el prota de "Mi nombre es violencia" (Clint Eastwood como sheriff campirano, un poco en borrador de Harry el Sucio), pero lo interpreta a su manera, lo que es un plus porque en esos años trataba de actuar y no sobreactuaba descaradamente como cuando hizo de villano en "Spiderman" (bueno, también está su magnífico rol de "La sombra del vampiro"). Además, Dafoe no es un carilindo, y eso ayuda a darle consistencia a su rol de agente encubierto un poco a la fuerza. Su contraparte es Mickey Rourke, que en esos años estaba al tope después de comerse a Carre Otis en "Orquídea salvaje" (y se la siguió comiendo por años, el jjjjjjdep...), y que compone a un personaje sinuoso y reptiliano. Mary Elizabeth Mastrantonio, por su parte, está un poco debilucha en materia actoral, pero tiene carisma y aporta. Y el cuarteto de protas se completa con un Samuel L. Jackson que en esa época todavía era una especie de secundario de lujo, antes de ser la superestrella al lado de John Travolta en "Pulp Fiction". Y en general, todos los personajes cumplen con crear esa sensación de juego duro que hay alrededor de esta peli semiWestern/semiredneck.

IDEAL PARA: Ver una de suspenso con nervio y garra.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [en inglés, sin subtítulos].



-- Comienzo de la peli, cuando encuentran al muertito [en inglés, sin subtítulos].

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