11 años de Cine 9009 en línea.

El próximo 19 de febrero de 2017, Cine 9009 cumplirá once años en línea. Sí, jodíos, cuéntenlos, once en total desde su inauguración en el ya lejano 2006. Y para celebrar, estamos embarcados en una minimaratón de posteos. De manera que entre el domingo 12 y el domingo 19 del febrero que ya mencionamos, habrá un posteo nuevo con una peli nueva cada día, en donde aprovecharemos de repasar algunas que vimos en el cine, y que por un motivo u otro no acabaron publicadas en su día. Y a no quejarse de que llegó demasiado tarde, que ya no las podemos ver en el cine y otras cosas. También está el cable, el streaming, los DVDs para los cuatro gatos que todavía los compran, y... er... well... medios menos legales para conseguírselas. Además, si fuera por eso, no habría posteado pelis de cine mudo que se estrenaron hace sus buenos 90 o 100 años atrás. De manera que... disfruten, y saludos para todo el mundo (eeeeeexcepto para ese perejil de allá... sí, tú, a tí te hablo... el de la IP chistosa... te reconozco, eres el imbécil que no apagó el smartphone el otro día en el cine. Cretino. Pero para el resto, saludos).

domingo, 28 de septiembre de 2008

"Azumi" (2003)


-- "Azumi". Japón. Año 2003.
-- Dirección: Ryuhei Kitamura.
-- Actuación: Aya Ueto, Shun Oguri, Hiroki Narimiya, Kenji Kohashi, Takatoshi Kaneko, Yuma Ishigaki, Yasuomi Sano, Shinji Suzuki, Eita, Shogo Yamaguchi, Kazuki Kitamura, Kenichi Endo, Kazuya Shimizu, Ryô, Michael P. Greco, Yoshio Harada, Masatô Ibu, Shôichirô Masumoto, Minoru Matsumoto, Jô Odagiri, Aya Okamoto, Tak Sakaguchi, Hideo Sakaki, Naoto Takenaka.
-- Guión: Mataichiro Yamamoto e Isao Kiriyama, basados en el manga de Yu Koyama.
-- Banda Sonora: Tarô Iwashiro.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Japón, finales del siglo XVI (no se nos indica la fecha, pero si eres versado en Historia Universal y escuchas que Tokugawa Ieyasu y Toyotomi Hideyoshi andan dando vueltas por ahí, te ubicas cronológicamente... o deberías, al menos). Un solo gran señor, el Gran Tokugawa, is overcoming over Japan, y traerá consigo el Reinado de la Paz bajo su férula. Pero los ambiciosos y levantiscos señores feudales gritan ¡¡¡FREEEEEEDOMMMMMM!!! (o lo que sea su equivalente japonés, ¿"feredorumu" o algo así quizás...?) porque desean seguir aniquilándose plácidamente entre sí con sus cruentas guerras. ¡Ya lo decía el viejo dicterio prusiano de que "puedes hacer cualquier cosa con las bayonetas, excepto sentarte en ellas"...! De manera que a un viejo maestro militar le dan la instrucción de crear una secta de asesinos que se encargue de eliminar cualquier brote de rebelión (una KGB/Mossad/CIA/CTU en versión japonesa, vaya). El viejo maestro acepta estoicamente el encargo, recluta a un grupo de boys, y se los lleva a lo alto de la colina para enseñarles templanza, heroicidad, apego a la misión, y letales técnicas de combate. Entre todos ellos destacan Azumi y Nachi, hembra y macho como Dios los creó... Y finalmente los diez jóvenes guerreros están listos. Entonces el maestro les pone la prueba definitiva. Agrúpense de a parejas. Lo hacen. Muy bien, ahora cada uno debe matar a su pareja. A los supervivientes los espero en la cabaña. Olvídense de arrancar, no llegarán demasiado lejos. Los pobres críos se miran entre sí, llorando de terror como los quejicas que son, pero en fin, hay que cumplir... Azumi y Nachi tienen uno de esos combates rituales de "te mato pero te respeto" que tanto orgasman a los japis, y luego Azumi, como es la más chupi y la peli se llama como ella, mata a su compañero. Ahora, los cinco guerreros están listos para su primera misión. Los wannabies feudales están alzándose en armas, y los asesinos compañeros de Azumi son la última esperanza para un Japón pacífico... (y totalitario, y dictatorial, y ultranacionalista, pero en fin, no se puede hacer sushi sin matar pescados...).

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Ya conocen el consabido ciclo. Primero se publica un manga en sepetecientos tomos. Si el manga tiene éxito, se lo adapta para animé o algo. Si tiene éxito ahí, pasa a ser un videojuego. Si sigue yéndole bien viene todo el resto del mercadishing. Con "Azumi", un manga que viene publicándose desde 1994, se saltaron todos los pasos previos y pasaron directamente a la peli. Y para llevar la contraria a los usos establecidos de la industria multimedia nipona, fue una peli de carne y hueso, no un animé. El manga original discurre sobre un fuerte conflicto moral: ¿es válido causar el mal a sabiendas, en pos de evitar un mal mayor? El objetivo final de Azumi y sus camaradas es evitar que estalle una guerra civil que descuartice a Japón, pero sus métodos son de una más que turbia moralidad. Nada que no hayamos visto en "24", y más remotamente en pelis como "Harry el Sucio", por ejemplo. En este caso el "bien" es el patrioterismo más rampante posible (Tokugawa Ieyasu, el unificador de Japón, trae el bien a su nación sin paliativos, y el que ese bien sea una dictadura totalitaria es algo que se pasa en sordina), lo que está bien en sintonía con el espíritu de ciertas facciones rad dentro del Japón actual, que no trepidan en ir a rezar a santuarios del Shintoísmo nacionalista y honran como mártires de la Patria a los kamikazes de la Segunda Guerra Mundial (olvidando de paso las masacres que los japis causaron, como por ejemplo la Masacre de Nanking). "Azumi" probablemente no pasará a la Historia como una peli brillante, ni siquiera si nos ceñimos al contexto de la cinematografía japonesa, pero es síntoma de que hay cucharas revolviendo el caldero, y cuando las mandíbulas suenan, sushi se está comiendo...

¿POR QUÉ VERLA?

-- Es una peli aceptablemente entretenida, a pesar de que está llena de tópicos a más no poder. Ignoro si el manga original era más profundo o tenía mayor riqueza conceptual, pero si ése fue el caso, acá se lo fusilaron íntegro. El mayor pecado de est... perdón, olvidaba que los japoneses no conocen el concepto de "pecado" sino el de "vergüenza". La mayor vergüenza de esta peli, decía, es su incapacidad para definirse por un camino u otro. A ratos quiere ser un mero matarratos, montando una batallita más espectacular que la otra, en plan "ROUND 1... FIGHT!!!" con una prota robótica que está ahí sólo para patear traseros (un poco a la manera de Milla Jovovich en "Resident Evil", que por asumirse plenamente en tal condición resulta una peli insubstancial, pero la mar de entretenida). Pero a ratos trata de darle algo parecido a cierta profundidad psicológica y moral al asunto, pero esbozado con brocha gruesa, y aquí es donde la peli naufraga irremisiblemente. Una vergüenza, Bastet, una vergüenza. Pero cuando se desprende de la pesada carcasa de "tener mensaje" y otras mariconadas por el estilo, la peli es un entretenido divertimento con chica mala-pero-buena, dura/sensible, enseñando de lo que es capaz el Power Grrl. Tampoco ayuda mucho la deslavadísima actuación de Aya Ueto, que le pone convicción a eso de destripar pobres diablos a katanazo limpio, pero que en las escenas dramáticas simplemente no consigue que le compremos el boleto. Quizás a un quinceañero sumido en el angst adolescente le podría impresionar un personaje como Azumi, pero afortunadamente para la Humanidad, el angst adolescente es una condición esencialmente transitoria de la que todos podemos curarnos para transformarnos en seres útiles a la sociedad (bueno, Rimbaud no lo logró, ehm...). Tampoco ayuda mucho que el dilema moral de causar el mal para evitar el mal, sea presentado en términos de un patrioterismo tan ramplón (sé lo que van a decir, que en las pelis yankis es lo mismo, pero yo nunca he excusado el patrioterismo yanki en las pelis de pro). ¿Será casualidad que esta peli es un año posterior a "Héroe", que también tenía el mismo discurso, pero en versión chinesca, y que acá tengamos a Tokugawa Ieyasu en reemplazo de Tsin Shi Huangti...? Para colmo, en vez de seguir una trama lineal que nos lleve del punto A al punto B, los guionistas insisten en embrollar el asunto todo lo que pueden, hasta el punto que la batalla final no tiene nada que ver con la misión original de la prota, y para pecado peor (perdón, para vergüenza peor) vemos al comienzo que la misión es matar a tres altos jerarcas enemigos, y al final de la peli se han despachado sólo a uno, lo que huele a trampa (sé lo que están pensando, y sí, hay "Azumi 2"). En fin, pudo haber sido una gran peli, pero se queda sólo en alimento para el angst adolescente y poco más que eso. Por excesiva. Por pretenciosa. Por querer ser más que la vida. En fin...

IDEAL PARA: Fanáticos del subgénero fílmico "tía buena pateando traseros".

ENLACES.

-- (Ir a la página) Entrada en IMDb.
-- (Ir a la página) Artículo de la Wikipedia en inglés sobre la franquicia de Azumi.
-- (Ir a la página) Comentario en la Off-Off-Crítica.
-- (Ir a la página) Comentario en Revista Cinefagia.
-- (Ir a la página) Nota en De Cine 21.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [doblado al español de Ezpaña].



-- Una emboscada de Azumi y los suyos [en japonés, subtítulos en español].



jueves, 25 de septiembre de 2008

"Paprika" (2006).


-- "Paprika". Japón. Año 2006.
-- Dirección: Satoshi Kon.
-- Actuación: Megumi Hayashibara, Tôru Furuya, Kôichi Yamadera, Katsunosuke Hori, Toru Emori, Akio Ôtsuka, Hideyuki Tanaka, Satomi Koorogi, Daisuke Sakaguchi, Mitsuo Iwata, Rikako Aikawa, Shinichirô Ôta, Satoshi Kon, Yasutaka Tsutsui.
-- Guión: Seishi Minakami y Satoshi Kon, basados en la novela de Yasutaka Tsutsui.
-- Banda Sonora: Susumu Hirasawa.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Desde los tiempos imperecederos que Japón es sinónimo de innovación: el sushi (siglo XXXIX a.C.), el Zen (siglo XII), los monstruos radioactivos (1945), la miniaturización (actualidad), y en un futuro cercano, la máquina para meterse en los sueños. Una superguerrera con el muy poco magicgirl nombre de Paprika, utiliza dicho artefacto, llamado el DC-Mini, para introducirse en los sueños de las personas y utilizarlos como terapia psicológica. Pero resulta que el famoso DC-Mini está inacabado, le faltan algunos mecanismos de seguridad, y pues bien, de ser utilizado las consecuencias podrían ser impredecibles. O sea, el ladrón (o el tercero subadquirente del artefacto robado) podría tener la capacidad de meterse en los sueños de la gente a distancia, e incluso sin que éstos se encontraran soñando, sino en plena vigilia. El equipo constructor del DC-Mini se embarca entonces en la búsqueda del ladrón, para recuperar el equipo antes de que caiga en malas manos (lo típico, vale). Desgraciadamente, el renacuajo que se lo robó parece tener alguna idea de para qué sirve el asunto, y de pronto, las personas que trabajan en el tema empiezan a verse acosados por una serie de pesadillas, incluyendo un payasesco desfile de carnaval que se comporta... bueno, de manera surrealista, como los sueños lo hacen, yo no sé que esperaban ustedes. ¿Conseguirán nuestros heroicos personajes detener al malvado ladrón antes de que consiga realizar lo impensable con el mundo de los sueños...?

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

La idea de una máquina que se meta en la mente humana es vieja como... No, no tan vieja como el mundo, pero sí tiene su solera. La premisa de esta peli es similar a "La célula" (sí, el infumable subproducto que intentaba mostrar a Jennifer Lopez con ropa spandex), pero si nos remontamos, hay cosas similares en "El hombre del jardín", e incluso en arqueopelis del registro paleontológico como "Mente salvaje" o "Proyecto Brainstorm". La idea básica es que si te metes en la mente, la propia o la ajena, te enfrentas a un mundo salvaje que te consumirá, blah blah blah blah (obvio, si todo fuera tan fácil, no habría peli, y por eso es más simple explotar una peli sobre los terrores de la ciencia, que una sobre las bondades de la misma, y eso díganselo a los productores de "Un milagro para Lorenzo"...). Pero estoy divagando otra vez. El animé japonés no podía ser insensible a la tendencia, y más tarde o más temprano tenía que sorprendernos con uno de estos dispositivos que "no es realidad virtual, pero es como si lo fuera".

¿POR QUÉ VERLA?

-- La peli no se recata. Es animé para adultos, y eso está claro desde el primer renglón. No sólo por haber algún desnudo por aquí o por allá, o por la magnífica y sadiana escena de tortura a la que es sometida la protagonista (eso de meterle la mano directamente por debajo de la piel, entre las piernas, e irla subiendo para rasgarla en dos...). También está la carga de problemas psicológicos que porta el policía, que son abordados de una manera bastante oscura y compleja. Al final desluce un poco, deviniendo en el clásico enfrentamiento héroe versus villano, pero en general el desarrollo es bastante sustentable, el mundo de los sueños es descrito de una manera muy pesadillesca sin caer en el cliché del Coco debajo de la cama o en el closet, y consigue mantener muy bien el equilibrio entre una trama con una lógica que pueda entenderse, y el surrealismo propio del mundo de los sueños en donde no hay lógica que valga.

-- No deberíamos alabar el acabado formal de la peli, toda vez que sabemos lo mucho que se esmeran los japis en crear sus mundos narrativos (bueno, también están Dragonball y Pokemon, pero acá estamos hablando de cine de verdad y no de subproductos para otakus ignaros). Pero sí merece mención expresa la estupenda banda sonora que compone Susumu Hirasawa, y que crea esa sensación onírica que por razones obvias debe portar esta peli. La música es amable y complaciente, tan luminosa como suele ser la música de un animé al uso, y sin embargo inquieta y desasosiega, remece el piso, crea una gran sensación de vacío. Y cuando tenemos secuencias "heroicas" con la prota haciendo su labor, la música también se pone vibrante y marchosa, pero aún así persiste esa sensación de que algo no está bien y no debiéramos caminar por el carril que estamos caminando... Un gran soundtrack, sin lugar a dudas.

-- Y más no se puede decir. Esta peli es una experiencia de vida, pero la vida es sueño, y los sueños, sueños son...

IDEAL PARA: Ver un animé atmosférico.

ENLACES.

-- (Ir a la página) Entrada en IMDb.
-- (Ir a la página) Artículo de la Wikipedia en inglés.
-- (Ir a la página) Completo comentario en Kira Cine & Manga.

VIDEOS.

-- Comienzo de la peli [doblado al español de Ezpaña].

domingo, 21 de septiembre de 2008

"Matar a todos" (2007).


-- "Matar a todos". Argentina / Chile / Alemania / Uruguay. Año 2007.
-- Dirección: Esteban Schroeder.
-- Actuación: Roxana Blanco, Jorge Bolani, Claudio Arredondo, Walter Reyno, Cesar Troncoso, Patricio Contreras, Dario Grandinetti, Maria Izquierdo, Juan Bonaudi, Guillermo Caraballo, Arturo Fleitas, Alma Claudio, Gabriel Ferreira, Walter Etchandy, Laura Baranzano, Alejandro Paz, Graciela Gelos, Martin Bellocq, Claudia Conti, Fabian Leoni.
-- Guión: Daniel Henríquez, Alejandra Marino, Pablo Vierci.
-- Banda Sonora: Martín Pavlovsky.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Un cartel al inicio de la peli nos pone en ambiente: durante los '70s hubo muchas dictaduras en Latinoamérica, que se dieron una ayudita gentil por la espalda a través del Plan Cóndor, una extensa red de sicarios que seguían el principio "yo rasco tu espalda y tú rascas la mía", que si yo mato a uno de tus traidores vendepatrias en mi país, tú haces lo mismo conmigo. Pero llegaron las democracias, y las redes de protección alrededor de los ejecutores, ahora debían asegurar el silencio de esos ejecutores... Con plomo, si es preciso. O sarín. Un par de individuos se desperezan, mientras otro está corriendo a campo traviesa. El par de individuos se mosquea porque "puta la cagá, se nos fue el hu*ón", pero el fugitivo se cree el cuento de que la libertad y la democracia blah blah blah, y ¿a dónde acude? A un cuartel policial, en la República de Uruguay. Nadie más lo vuelve a ver. La denuncia llega de alguna manera hasta una fiscal de Uruguay (parece que era fiscal, ni idea de cómo está constituido el Poder Judicial allá), que como es tradición en el cine IIVVC ("Individuo Idealista Versus Vasta Conspiración"), decide que el caso debe ser investigado sin importar qué tan raro huela. La fiscal tiene una vida marital un tanto ñaj, pero igual hay romance, pero sobre ella pesa la sombra de su familia, un papá milico y un hermano ídem, que "mijita, pa' que revuelve el tarro, mire que no sabe con qué se está metiendo", etcétera. Puro Darth Vader, oiga. Pero la chica es porfiada, porque si no lo fuera renuncia y no hay peli, y sigue adelante con valor y estoicismo. Y empieza a descubrir lo que nosotros ya sabíamos, que existe una red de protección alrededor de gente que se dedica a hacer desaparecer suches de las dictaduras, etcétera. A propósito, ¿mencionamos que el desaparecido es Eugenio Berríos, el chilenito que fabricaba gas sarín on the rocks para el gobierno de Augusto Pinochet...?

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

En 1990 regresó la democracia a Chile, o al menos un sucedáneo liofilizado de la misma. Descontando que en Chile se ven desde 1990 a las mismas figuras políticas sin recambio generacional, que los partidos políticos están agrupados en dos conglomerados que se disputan los escaños (Concertación y Alianza) con los comunistas desbordando por la periferia y reclamando "¡Quiero jugar!", y que se arma un escándalo del demonio porque las FARC mandan E-Mails a los mapuches (¡intervencionismo!) pero nadie dice nada sobre la CIA mandando billetes contantes y sonantes a la prensa chilena para apoyar golpes de estado, podríamos decir que sí, que Chile es una democracia, sin hacer demasiada política ficción. "Cute", la calificarían los gringos (sí, como las minitas tontas en las pelis yankis dicen del chico guapo: "It's cute!", "Oh, it's so... Oh..."). En fin. Ya en los tempranos '90s se compiló y publicó el Informe Rettig, que permitió determinar la extensión de los crímenes cometidos por la DINA y la CNI en contra de la población civil, pero fue recién en 1998, cuando Pinochet fue arrestado en Londres, que los juicios contra militares que se excedieron en sus funciones de protección a la Patria, hasta entonces más bien goteras en el sistema, se convirtieron en un cauce torrentoso e imparable (el "desfile de militares por los tribunales" de que se quejaban los militares en aquellos años). Esta peli se ambienta en un episodio de aquellos años intermedios, en la Era de la Gotera Judicial, en los días previos a la aparición del cadáver de Eugenio Berríos, que como se comprobó después, resulta que era el fabricante de armas químicas de Pinochet, algunas de las cuales pudieron ser utilizadas o no en el asesinato del ex Presidente Eduardo Frei Montalva (a diferencia de David Palmer, Frei Montalva no ha tenido nunca un Jack Bauer que lo vengue). Pobre Berríos, por ser chileno recibió... el pago de Chile.

¿POR QUÉ VERLA?

-- Estas pelis "con conciencia" tienen su valor agregado por aquello de revolver en las cosas del pasado que no quedan claras, de mantener viva la memoria, etcétera, pero lo que nos ocupa no es tanto si hace buena política o no, como: ¿es una buena peli? Y digámoslo de entrada, a pesar de estar basada o inspirada al menos en un crimen político o semipolítico real, esta peli no es Oliver Stone ni Costa-Gavras, y que nadie espere encontrarse con "JFK" o "Missing" aquí. Ni de lejos. La Operación Cóndor daba de por sí para una gran peli sobre las dictaduras y las conspiraciones secretas, aunque sea por la carga épica de tener a protas viajando, gente de las altas esferas haciendo telefonazos con diálogos misteriosos, escenas de acoso (tipos mirando raro, mascotas muertas... lo típico). Y si no tiene escenas así por un prurito de realismo que evite las convenciones dramáticas ezque-Hollywood, bueno, al menos siempre queda crear atmósfera, tensión dramática, a partir de la claustrofobia de sentirse acechado sobre un volcán, etcétera. Al principio el asunto parte bien, con un tipo perseguido que huele a cadáver de antemano (el Eugenio Berríos que le dicen) y con claras muestras de haber corrupción en el asunto (esa comisaría de policía...). Pero luego aparece el personaje de la fiscal, o lo que sea la chica (que no es tan chica, es madre de familia y todo), y todo empieza a desdibujarse. Vemos un retrato de la familia de la chica y nos decimos "ah, es que están creando ambiente para el asunto", y en particular cuando vemos que el padre militar también está metido en el ajo. Bueno, la chica buena y el padre malo en un bullado caso judicial ya lo habíamos visto en "El proceso final", pero qué diablos, si funciona no lo arregles... Pero resulta que la investigación no avanza, la chica se queda entrampada, para colmo aparece una subtrama totalmente carente de sentido en la que quiere y no quiere con un antiguo pololo con el cuál fueron conjuntamente torturados (el amor todo lo puede...) y con el marido visiblemente mosqueado, por supuesto... En resumen, la primera mitad de la peli es una estupenda preparación para una segunda mitad que nunca llega. Al final (sí, contra mi costumbre voy a reventar el final, así es que ***AQUÍ COMIENZA SPOILER***), como gran cosa, el jefe ordena carpetazo a la investigación con pruebas falsificadas, el Parlamento acoge las pruebas diciendo "Berríos está en Italia", la chica renuncia a la fiscalía después de decirle al jefe "es que vos sos un vendido, sos un hijo de puta", y después la mentira se desmorona porque aparece el cadáver de Eugenio Berríos en la playa. Y fin. ***FIN DEL SPOILER***. ¿Y en medio? Bueno, vimos como el pasado de la dictadura militar se inmiscuye en el presente, por más que tratemos de superarlo no podemos, hay que sanar las heridas... Nada que una buena cantidad de pelis postdictatoriales no nos hayan enseñado antes ("Amnesia" de Gonzalo Justiniano no era una obra maestra, pero trata el tema mucho mejor). Al final daba lo mismo que la peli tomara el caso de Eugenio Berríos, la verdad es que podía haber sido un caso policial de ficción y todo hubiera quedado igual. En "La comedia del poder", Chabrol tuvo al menos la picardía de tomar un caso real, pero ficcionalizarlo su resto para evitar contar la historia de ese caso real y centrarse en lo que le importaba, que era Isabelle Huppert haciendo de pesada como jueza de hierro. Un dato: cuando a mitad de peli encuentras más interesante empezar a mirarle el prominente busto a la prota Roxana Blanco, en medio de un thriller basado en un crimen real, es que algo anda mal (bueno, en Hollywood las eligen bustosas, pero acá se supone que es una peli seria y no un entretenimiento hollywoodense al uso, ¿no?).

-- María Izquierdo. Hace una brevísima aparición (cinco o diez minutos, creo) como una de las cómplices de los asesinos de Berríos, que acaba de ser declarada loca por decreto judicial y por ende no puede decir nada de utilidad. La entrevista devela poco (la peli entera en general devela poco, fuera de que los militares fabricaban gas sarín). Su personaje se llama Mariana Morris, pero es bastante obvio para quien conozca la realidad chilena que se trata de Mariana Callejas (las dos son señoras, las dos tenían sótanos dignos de "Hostal", las dos organizaban tertulias literarias en dictadura...). Mariana Morris está completamente tocada de la cabeza y María Izquierdo se encarga muy bien de transmitir eso. Y de paso se come con patatas al resto del elenco, que no está mal, pero es que bien-bien-bien, lo que se dice bien, tampoco (y no ayuda que casi todos estén en papeles-tipo: el papá pesado-pero-preocupado, el hermano pesado-pero-preocupado, el antiguo amante amigo-pero-quiero, el marido cuasicornutto...). Pero María Izquierdo, se saca los zapatos en su escena. Su única escena. Quizás la única que realmente vale la pena de la peli.

IDEAL PARA: Amantes de las pelis sobre hacer conciencia reflexiva sobre las dictaduras militares, etcéteras.

ENLACES.

-- (Ir a la página) Sitio oficial de la peli.
-- (Ir a la página) Entrada en IMDb.
-- (Ir a la página) La peli y su contexto según Fundación Síntesis.
-- (Ir a la página) Comentario en Pochoclos.
-- (Ir a la página) Comentario en Cine Latino en Nueva York.
-- (Ir a la página) Palabras del director en Cine Enterarte.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [en español].


jueves, 18 de septiembre de 2008

"Caliche sangriento" (1969).


-- "Caliche sangriento". Chile. Año 1969.
-- Dirección: Helvio Soto.
-- Actuación: Héctor Duvauchelle, Patricia Guzmán, Jorge Guerra, Jaime Vadell, Jorge Lillo, Arnaldo Berríos, Jorge Yañez, Teresa Vernal, Mario Vernal.
-- Guión: Helvio Soto.
-- Banda Sonora: Tito Ledermann.

-- "Caliche sangriento" en IMDb.
-- "Caliche sangriento" en su blog oficial y sobre su proceso de restauración en 2006.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Desierto de Moquegua, 1880. Una patrulla de diecisiete chilenitos marcha a plena luz del Sol, sin suministros y casi sin agua, con rumbo incierto. Su objetivo es alcanzar algún destacamento, cualquier destacamento, de fuerzas chilenas. O el del capitán, mejor dicho, porque el de los soldados es simplemente sobrevivir. A propósito, ¿ya mencioné que Moquegua no está en Chile sino en Perú, y por tanto estos chilenitos son una fuerza de ocupación en toda regla? La tropa, que queremos ir a la costa, que queremos ir a la costa, que acá nos vamos a desecar y vamos a terminar acompañando a las momias incaicas en su periplo a la Eternidad, pero el capitán, dale que no, que tenemos nuestras órdenes, que debemos cumplir a costa de nuestras vidas si es preciso, que el sacrificio es necesario para ganar una guerra, etcétera. En medio de su marcha por el desierto, los incidentes empiezan a sucederse. La tropa empieza a indisciplinarse. Uno de ellos empieza a disvariar en la noche y otro de ellos decide rematarlo con el temido y temible corvo chileno. Posible juicio sumario con fusilamiento, por ser un militar tanto muerte a otro militar. Aunque el asesino haya tenido un móvil "humanitario" y en realidad no sea milico sino un civil enganchado, un bruto minero para ser más precisos. De tanto andar, finalmente consiguen arribar a un poblado peruano. De lo que vendrá la segunda parte: mantener el poblado peruano en manos chilenas. ¿Y todo esto para qué? Bueno, para ganar la guerra... ¿para el pueblo de Chile? Los patipelaos creen que sí, pero los enterados, los verdaderos enterados, saben que Chile y Perú no son más que peones en el juego económico de los barones de la Banca Británica... Así es que al final de todo no habrá que gritar "¡Viva Chile!" sino "God save the Queen!"...

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Hemos hablado en Cine 9009 sobre los hippientos '60s de Estados Unidos con toda la contracultura de la rebelión. Pero había algo de flema británica en los hippies yankis, que muy contra el establishment podían estar, pero amaban a su país y los valores de la democracia americana (de hecho, criticaban al Gobierno de Nixon por ser antiamericano). Pero en Chile las cosas fueron distintas. Con una oligarquía corrupta mucho más fuerte y corrupta que la de Estados Unidos, ansiosa de que todo Chile fuera manejado como un regimiento militar, pegado a las faldas del Ejército "vencedor jamás vencido" y de la Iglesia Católica, no era raro que los campeones de la libertad y la democracia terminaran siendo empujados al contrasentido de inclinarse hacia la dictadura totalitaria soviética (la consecuencia no suele ser una característica de ustedes los humanitos en general). Eran los años otoñales del Gobierno de Eduardo Frei Montalva (1964-1970) y de su "revolución en libertad", que quería meter cambios en ese gran latifundio que era Chile (de ahí lo de revolución), pero sin ceder ante la tentación marxista de la dictadura totalitaria auspiciada por el Vodka Stalin (de ahí lo de "en libertad"). En el cine, esto se manifestó en una honda reacción antihollywoodense, inspirada por la Nouvelle Vague y el Free Cinema (y más lejanamente por el Neorrealismo italiano), hermanada con el Cinema Novo de Brasil, y liderada por los parámetros del cine "de auteur" impulsada por la "Cahiers de Cinéma". El adalid de este movimiento fue sin lugar a dudas Aldo Francia, que con apenas dos pelis ("Valparaíso mi amor" y "Ya no basta con rezar") creó el vivo retrato de lo que fue ese período histórico. Dentro de ese contexto, "Caliche sangriento" tenía todas las credenciales para formar un tríptico con las otras dos. Pero eso no ocurrió, o bien ocurrió de manera muy subliminal. Sucede que la peli era profundamente contestataria para su tiempo, ya que retrataba la Guerra del Pacífico no desde la perspectiva tradicional del militarismo chileno (es decir, un glorioso paseo de héroes triunfales que les dieron una lección a esos sucios y andrajosos peruanos y bolivianos que tuvieron el atrevimiento de medirse con el Ejército Vencedor Jamás Vencido), sino como lo que más que probablemente fue, un osario al que huesos de innumerables chilenos, peruanos y bolivianos de la plebe, que no de las clases pudientes, fueron a ser enterrados para gloria y beneficio de unos pocos politicastros aliados o comprados por el dinero británico. Causó tanto escozor, que la democracia chilena (recordemos la propaganda conservadora, de "una isla de estabilidad en el contexto latinoamericano", con sus "150 años de tradición republicana", lamentablemente interrumpidos en 1973) decidió lisa y llanamente censurarla, recortando escenas completas que podían causarle soponcio a las esposas de los Generales de la República. Bueno, esta peli era crítica con los militares, ¿y? Los propios militares le dieron la razón a la peli cuando cuatro años después de su estreno derribaron al gobierno constitucional chileno e hicieron todo que después quedó detallado en el Informe Rettig, en el Informe Valech, etcétera. La peli pasó a un discreto segundo plano, e incluso a un relativo olvido, por supuesto, orquestado por aquellos a quienes "Caliche sangriento" daba hondo sarpullido, incluyendo a los dueños de los consorcios vinculados a los medios de comunicación. Pero en 2006, tras una paciente labor de restauración, la peli quedó de nuevo lista para ser exhibida. Y a diferencia de pelis como "Palomita blanca", que ganó estatus de culto en la dictadura por ser simplemente "una peli prohibida", "Caliche sangriento" sí que merecía volver a ser exhibida.

¿POR QUÉ VERLA?

-- Esta peli es una profunda desmitificación de la tradición militarista chilena, de la cual la Guerra del Pacífico es uno de sus hitos fundacionales. Esta peli defiende a brazo partido la tesis de que la guerra no fue librada por motivos de justicia, sino por un mero móvil económico, para proteger el interés de unos cuantos potentados cuyos apellidos ni siquiera eran chilenos sino extranjeros. Estamos así en las antípodas de la visión triunfalista y hollywoodense de "La patrulla del desierto", la mítica miniserie que Canal 13 exhibió por allá por 1992 (año más, año menos), en la que un grupo de héroes chilenos se encargaba de hacer el John Rambo con peruanos y bolivianos durante la Guerra del Pacífico. Lo dice bien el personaje de Jaime Vadell en la peli, cuando apunta (no cito completamente textual): "Los británicos ponen el capital, y nosotros aportamos los muertos". La peli elige deliberadamente no el ángulo de los chilenos versus los bolivianos, sino de una banda de chilenos extraviada en país extranjero, sin ninguna legitimación moral para andar por ahí (de hecho, son invasores, y así es como son tratados por los montoneros y regulares peruanos), y a través de sus historias mínimas vemos cuán poco interesaba a esos pobres diablos el destino trascendente de una Patria que en ningún minuto estuvo bajo amenaza militar directa de Bolivia o de Perú. Quizás uno de los puntos débiles de la peli es poner esta tesis en boca de un personaje muy improbable (Jaime Vadell actuando como solía hacerlo cuando era buen actor, en el rol de un abogado santiaguino enlistado en el Ejército y pensando toda la guerra con su mentalidad reflexiva de civil ilustrado y no de milico bruto), pero de todas maneras el mensaje es claro, y lo que más interesante, es razonable.

-- En un contexto más lejano, la peli es también un furibundo alegato antimilitarista. Se inscribe así en la vena de pelis como "Salvando al soldado Ryan", pero su realización debe haber costado como cien veces menos, y el mensaje es todavía más potente porque no hay glamour ni boato hollywoodense acá. No importa qué tan noble o qué tan justa sea la causa, la guerra siempre causa el mal irreparable de que la gente muere, y muere por una causa que muchas veces no es la suya. Es bien sabido que los políticos que declaran las guerras casi nunca envían a sus propios hijos a lucharlas, sino que los dejan bien protegiditos en la línea de retaguardia, y que los hijos de los patipelaos mueran en el frente de batalla (como crudamente lo expuso Michael Moore por la vía del experimento científico en una de las mejores escenas de "Fahrenheit 9-11"). La mayor parte de la peli es ver a una patrulla de pobres diablos correteando por el desierto sin rumbo fijo, e incluso sin una misión precisa, completamente extraviados en una tierra hostil, y que para colmo ni siquiera son héroes o jovencitos, sino apenas un grupo de brutos que trata de hacer algo tan humano como sobrevivir y alcanzar otro día. Muere gente en la peli, y muere sin ningún sentido del sacrificio o del heroísmo, muere simplemente porque en la guerra vuelan las balas o muerden los corvos y si te interpusiste en el camino, mala suerte para tí y que alguien cuide de tu bonito cadáver. Ningún personaje es demasiado importante, porque en definitiva no son más que peones. La peli es sobre la Guerra del Pacífico, por supuesto, pero las conclusiones que extrae son aplicables en realidad a cualquier guerra en la que el dirigente máximo de la misma no sea un jefe de horda dispuesto él mismo a marchar en primera fila a matar o morir.

-- En un nivel formal, la peli es simplemente formidable. Durante muchos años (hasta los '90s, más o menos) fue tradición defender las pelis chilenas, por muy mal hechas que estuvieran, porque "son chilenas, tienen menos medios que Hollywood, debemos ser indulgentes con ellas". Pero esta peli no necesita defensa de ningún tipo, porque dentro de lo misérrimo de su presupuesto, lo bien construido de su guión y lo preciso de su estructura la convierten en una joya de peli. Las escenas del pelotón vagando por el desierto reflejan toda la tragedia de un grupo de desgraciados condenados prácticamente a morir en el desarraigo (la idea de "morir en tierra extranjera" flota a lo largo de toda la peli). El shootdown en una aldea desierta, muy deudora del Spaghetti Western a lo "El bueno, el malo y el feo", es una secuencia de preciso nervio narrativo, conseguido con una gran economía de recursos. La masacre en el pueblito peruano está despachada sin lirismos de ninguna clase, y con ello adquiere nuevos ribetes de brutalidad, sin cargar la mano en el gore como suele ser el uso hollywoodense. Casi cuarenta años después esta peli (en versión restaurada, por supuesto) puede verse sin necesidad de "ponerse en época" ni mucho menos, porque salvo algún que otro manierismo "de auteur" (ese final con RePlay, cual gol de partido de fútbol...) sigue siendo terriblemente actual también en su aspecto formal.

-- Las actuaciones son brillantes. Los dos que se llevan el palmarés son por supuesto Héctor Duvauchelle y Jaime Vadell. El primero compone al capitán como un militar seco y preciso, de pensamiento brutalmente unidireccional (soy militar, me dan órdenes que debo cumplir, la gente que está bajo mío debe cumplir las órdenes que yo imparta, los civiles no valen nada, nosotros salvamos a la Patria, fin de la discusión), pero que también es capaz de tener gestos de gran nobleza, tal y como se muestra en la escena en que por fin obtienen un poco de agua, y en vez de reservarse el privilegio de beber primero, se queda al último aún a riesgo de que el agua no le alcance. A través de los ojos del capitán podemos ver así toda la irracionalidad del leyendario patrio, que como cualquier otra elaboración mítica, le debe más a los anhelos y fantasías reprimidos que al pasado histórico chileno. El segundo compone a un abogado santiaguino que es por supuesto el vehículo de las tesis de la peli, y aunque como decíamos su personaje es altamente improbable (¿a santo de qué ponerse a pelear con su capitán por los motivos hondos de la Guerra del Pacífico, si lo que importa en el minuto es salvar el pellejo?), Jaime Vadell lo interpreta con una enorme convicción y consigue transmitirnos toda su empatía. Los restantes personajes están casi de comparsas, pero cada uno se ajusta muy bien a sus roles mínimos, sin desplantes de ningún tipo.

IDEAL PARA: Ver una feroz desmitificación de la mitología patria chilena, un furibundo ataque contra el militarismo de cualquier clase, y una buena peli sobre la condición humana en general.

OTRAS PÁGINAS SOBRE "CALICHE SANGRIENTO":

-- (Ir a la página) Comentario en Vida En 35 Milímetros.
-- (Ir a la página) Sobre la peli en The Sophie News Show, citando a El Mostrador.
-- (Ir a la página) Comentario en Pisagua Comic.
-- (Ir a la página) Nota en Cine Perú.

VIDEOS.

-- Inicio de la peli, video en la versión NO restaurada [en español, con carteles de créditos estampados en alemán...].



-- Secuencia en la aldea peruana tomada por tropas chilenas [en español].

domingo, 14 de septiembre de 2008

"El novio de mi madre" (2007).


-- "I Could Never Be Your Woman". Estados Unidos. Año 2007.
-- Dirección: Amy Heckerling.
-- Actuación: Michelle Pfeiffer, Paul Rudd, Saoirse Ronan, Stacey Dash, Fred Willard, Jon Lovitz, Sarah Alexander, Tracey Ullman, Yasmin Paige, Rory Copus, O.T. Fagbenle, Jayden Berry-Garvey, Iddo Goldberg, Noah Lee Margetts, Jonathan Ryland.
-- Guión: Amy Heckerling.
-- Banda Sonora: Jess Bailey.

-- "El novio de mi madre" en IMDb.
-- "El novio de mi madre" en la Wikipedia en inglés.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Ha pasado el tiempo, y Michelle Pfeiff... perdón, Rosie ya no es la jovencita rompehielos que alguna vez fue. Pasó la cuarentena, tiene una criatura chica que está entrando en los terribles 11 (¿o 12? Qué se yo, no me acuerdo), y su maridito decidió casarse con una chiquilla de veintialgos (sí, parece el chiste de "cambio una de cuarenta por dos de veinte"). La vida siempre le aguarda sorpresas, porque verán, aunque hay telarañas en el falopioverso, ser madre de una criatura que recién empieza a caer en las redes de aaaaaahhhhhh... amoooooor... y ser la guionista/productura/almamáter de una serie de TV de adolescentes cool es todo su mundo. Hasta que de pronto el cabronazo de su boss le dice que, bueno, verán, eso de programas infantiles/juveniles/whatever ya no rinde, no la lleva, y debemos introducir cambios en el programa si es que queremos mantenerlo a flote. Nuestra buena Rosie se resiste y se resiste, porque el brillante concepto de renovación es hacer un extreme-makeover, y nuestra chica dice que no, que eso está saturado, old-fashioned, etcétera, pero la palabra del jefe es la palabra del jefe, y se llama a un casting para proveer el papel de un nerd volviéndose el head of the class. Como suele suceder en los castings, se llena de chicos que compensan la falta de talento con chorreón de narcisismo (¡hey, lo mismo pasa en los torneos de "Vampiro: La Mascarada"!), y pareciera que la búsqueda es un fracaso, hasta que... ¡sorpresa, señores! Aparece el Chico Maravilla. Tan maravilla, que nuestra cuarentona Rosie empieza a qué estoy haciendo, poniendo ojitos, etcétera... Y el chico, pues, como que corresponde... Y empieza a flotar love in the air... Pero ¡quién está de por medio! ¡Oh, sí! ¡La hijita preadolescente! O no, porque el chico se la da vuelta enseñándole como pasar cierto videojuego que es el favorito del compañero de escuela de ella... Pero ése será el primero de los obstáculos. Vendrán peores. Incluyendo, por supuesto, la neurótica inseguridad de una cuarentona que cómo va a ser la Demi Moore de Ashtun... Ashtoon... Ash... No, no me digan ¡salud!, no estoy estornudando... ¿Cómo es que se llamaba ese impresentable? ¡Bueno, el criaturo ése, el pobre sustituto del gran Bruce Willis! Y eso por no hablar de las intrigas cruzadas en el ambiente laboral... El drama estaría servido, de no ser porque esto es una comedia. Y de las buenas, si me preguntan.

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

MILF la lleva. En el 2000, las veinteañeras tienen un poquito de gusto a nada, de sosainas, y tienen que madurar su resto antes de llegar a los peligrosos treintas. Y los cuarentas y los cincuentas... Pregúntenselo a Ash... Esh... Pashtun Kuchen o como se llame, el que se afila a Demi Moore. O a Guy Ritchie, que se come los ya transitados Firestone de Madonna. Antaño, 30 era el umbral de la muerte para una mujer, y a los 40 estaban ya acabadas (para la gloria ese gran diálogo de Goldie Hawn en "El club de las divorciadas", que decía algo así como: 'Sólo existen tres edades para las actrices en Hollywood, jovencitas, fiscal de distrito y "Conduciendo a la Señora Daisy"'). Pero claro, a condición de que la MILF tenga recursos. Dinero. El poder del sex-appeal. Una MILF debe tener money para enchularse, hacerse las cirugías pertinentes, etcétera. Una MILF sin dinero no es MILF, es simplemente una veterana (dicho así, con cariño, por aquello de lo políticamente correcto). Antaño, una MILF era una mujer medio acabada ("El graduado"), y hasta tiempos bien recientes era una especie de fantasía adolescente ("Y tu mamá también"). Pero ahora, aunque sea una comedia, el tema se está volviendo serio. Mortalmente serio. Como en "Infidelidad", por ejemplo. Las MILF ya están aquí, y llegaron para quedarse. Así es que mejor tomárselo con humor. Como acá.

¿POR QUÉ VERLA?

-- Aunque todas las críticas positivas de esta peli han partido por elogiar a Michelle Pfeiffer (merecidamente, por lo demás), partamos primero por ese angelito invisible (o demonio, según el caso, pero angelito aquí) llamado "director". Amy Heckerling hace rato que pasó la sesentena (cero posibilidad de autorreferencia MILF aquí, entonces), pero en su vasta y no demasiado prolífica carrera fílmica ha dejado un puñado de pelis relativamente clásicas, de las que sólo me basta enunciar los títulos: "Años locos en Ridgemont High", "Vacaciones en Europa" (bueno, en este caso recordemos que es parte de la saga de Chevy Chase), "Mira quién habla", "Mira quién habla ahora", "Ni idea"... Esta peli podríamos considerarla como "más madura", incluso con una perspectiva más otoñal que las anteriores, debido al choque entre el "estoy vieja, la vida y el amor se acabaron para mí" y el "¡quiero vivir!". Pero bueno, la señora Heckerling sigue incombustible al pie del cañón, y no deja que lo melancólico del tema le carcoma lo principal, que es hacer reir. Y en eso lo logra, con un guión inteligente (escrito por ella misma) y una estupenda dirección de actores. Además, ella conoce más que sobradamente el ambiente de trabajo dentro de la televisión (tanto "Años locos en Ridgemont High" como "Ni idea" parieron sendas series de TV), así es que acá está en su salsa.

-- Ahora sí. Lo que estaban esperando. Michelle Pfeiffer: ¿se mantiene la vieja sobre su esqueleto o se la come la osteoporosis? Recordemos que la Pfeiffer (nativa de ¡1958!, o sea de la edad de Madonna y un año más joven que Sharon Stone) fue sex-symbol ya en los tempranos '80s (era la noviecita de Al Pacino en "Caracortada", y la siguió dando con "El hechizo del águila", "Casada con la mafia", "Relaciones peligrosas", la escena en que se revuelca con un vestido rojo sobre un piano en "Los fabulosos Baker Boys"...), y a la par que interpretaba magníficamente a Gatúbela en "Batman regresa", ya en 1991 aparecía como "vieja de vida sentimental acabada" (¡¡¡!!!) junto a Al Pacino (again) en la por otra parte estupenda "Frankie y Johnny". Uno podría esperar por tanto que la señora se arrastrara ahora en un fútil intento por volver a arañar la cartelera, como una Goldie Hawn cualquiera, ¡y no! Después de algunos años de silencio volvió con esta comedia, y con su insigne rol de "Stardust", no sólo asumiendo los años y llevándolos dignamente, sino que también pateando traseros sin necesidad de disimular las arrugas ni mucho menos. A punta de puro talento actoral. Y que lo tiene. Como acá, por ejemplo, asumiendo con valentía que ya no tiene 25 (bueno, tiene 49 y su personaje 40, pero en fin...). Y haciendo comedia de eso. Y mostrándose sexy, completamente segura de sí misma y de lo que está haciendo. Gracias a ella, esta peli no luce como una relación maternofilial sino como una verdadera y equilibrada relación romántica, en la que incluso él pareciera ser a veces más maduro que ella (el personaje de él tiene 29, o sea, es 11 años menor, aunque el actor tenía 38... ¡menudo enredo!).

-- Pero el resto del elenco no se queda a la zaga. Paul Rudd es una magnífica elección como partner de la Michelle Pfeiffer, y se nota que se la pasaron bomba rodando esta peli (o eso, o son muy buenos actores, no sé). La creepy Saoirse Ronan (prueben a escribirlo ustedes), que daba de que hablar comiéndose con zapatos a todo el elenco de "Expiación, deseo y pecado" (Keira Knightley incluida) con sus tiernos 14 añitos, acá es capaz de dar la réplica a Michelle Pfeiffer sin transformarse en el cliché de la niñata antipática, pero con una personalidad bien marcada y definida. Sarah Alexander (ya actuó con la Pfeiffer como una de sus brujas subordinadas en "Stardust"), conocida por su protagónico en la brillante serie británica "Coupling", acá está a la altura como una odiosa secretaria que no es feliz si no ve desgracias a su alrededor. Stacey Dash, que ya estuviera en una Heckerling Movie (era la amiga nigga de Alicia Silverstone en "Ni idea"... ¡Bastet, esta chica tiene pacto con el diablo, no envejece!) está notable como la estrellita de medio pelo que le baja el sobrao y va y viene de sexy (se supone que es una veinteañera que interpreta a una adolescente de secundaria... y si alguien me hubiera dicho que ya pasó la cuarentena le hubiera arañado la nariz por mentiroso... ¡pero es cierto, ya pasó la cuarentena, señores!). Tracey Ullman está un poco insoportable como "conciencia de la prota", pero admitámoslo, el único aporte de esta señora a la Historia de la Civilización Occidental en realidad es haberle dado un segmento dentro de su programa ochentero a "Los Simpsons", antes de que obtuvieran media hora semanal para ellos solos. Y Jon Lovitz, ya envejecido, pero siempre good vibes, está topísimo como el ex marido de Michelle Pfeiffer (Michelle, él no te merecía... miau...).

-- La prota trabaja de productora/guionista de una serie de TV que tiene un nombre tan mascachicles como "¡Ustedes la llevan, chicas!", o algo así ("You go, girls!"), incluyendo la inevitable canción bubblegum de letra "no dejes que la vida destruya tus sueños", interpretada por la mina Tetanic de rigor (Stacey Dash, que por esos años era chica Playboy, por cierto... busquen en Google Image, sin el SafeSearch conectado por supuesto). Mientras más miraba la serie de TV dentro de la peli, más me parecía una sátira desenfadada de "Salvados por la campana", incluyendo una mención por ahí al personaje de Screech, que era el que verdaderamente la llevaba en la serie (por algo lo conservaron para el vergonzoso spin-off "Salvados por la campana: La nueva generación"... ¡sí, hicieron una!). ¡Ah! Y no debe olvidárseme el mencionar los escenarios de colores verde loro, rojo furia, amarillo chillón... Todo en delicado contraste con la vida cotidiana de los protas, en una quizás no demasiado sutil crítica contra cómo te venden fantasías preenvasadas por la TV, y tú te las tragas pasivamente porque te gustaría que tu opaca vida fuera como esos chicos guapos y esas chicas bigbreasted por la experiencia vicaria de sentarse frente a un artefacto en vez de ir a buscarse una vida. Y esto, sin necesidad de remarcar el mensaje, sólo introduciendo alguna sutileza por aquí y por allá...

-- Evita un defecto muy serio que arruina muchas comedias románticas, y que es el desconfiar de la comedia para crear una gran comedia. Me explico: muchas comedias románticas tratan de ser más románticas que comedia, y para esto crean situaciones de "me caigo y aporreo" para hacer reir en la primera mitad, y en la segunda viran al drama para mostrar que a pesar de ser comedia, también tienen alma y sentimientos (sensiblería y ñoñería, lo llamaría más bien). Sandra Bullock podría dar cátedra de eso, con sus caretos de "la c*g*é media peli, pero igual me merezco ser feliz, por qué no me resulta, ¡diablos!". Acá no. Cuando una escena pareciera que va a derivar al drama, se las arregla para mantener siempre el tono de comedia ligera. Con lo que esta peli gana muchos enteros en profundidad, porque el verdadero mensaje se va al subtexto, y no peca de discursiva en ningún minuto (bueno, quizás la no muy necesaria adición de Tracey Ullman... Pero en fin).

-- Escenas memorables. Paul Rudd bailando algo así como pseudobreakdance en el suelo de la disco. El primer beso. Michelle Pfeiffer mirando los intentos de su hija por acercarse al chico que la ignora (y que le gusta, claro está). La criatura Saoirse negociando la edad de su "primera vez" con su mami (lo dicho, esta chica es más creepy que Kirnsten Dunst en "Entrevista con el vampiro"). Sarah Alexander doing the bad girl. Todas las secuencias relativas al programa ése de las chicas arriba. El gran diálogo del director de la cadena diciendo "¡El rating se está desplomando, nada de temas serios como discriminación racial o embarazo adolescente, a partir de ahora pura comedia!". Y en general, la peli entera en realidad.

IDEAL PARA: Ver una gran comedia MILF, una gran comedia romántica, y una estupenda peli a secas.

OTRAS PÁGINAS SOBRE "EL NOVIO DE MI MADRE":

-- (Ir a la página) Nota en Todo Cine.
-- (Ir a la página) Comentario en Toma-Uno.com.
-- (Ir a la página) Compilación de comentarios en Pochoclo.com.
-- (Ir a la página) Comentario en El Comercio Perú.
-- (Ir a la página) Comentario en Dolce City.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [en inglés, subtítulos en español].



-- El jovenzuelo se lleva a la veterana a la disco y hace el mongo bailando [doblado al español de Ezpaña, pero no se preocupen, es una escena casi sin diálogo].



-- Saoirse Ronan haciendo lo suyo [en inglés, sin subtítulos].

viernes, 12 de septiembre de 2008

ENCUESTA CINE 9009: Sobre Cine 9009.

Como bien saben los lectores habituales de Cine 9009, este blog cambió el formato de texto después de su reseña N° 400. Y después de un tiempo rodando el asunto, le preguntamos a nuestros lectores qué tal les parecía el nuevo formato, si acaso era preferible volver al antiguo, o hacer una mixtura de los dos. Esto fue lo que nos respondieron en la encuesta "Sobre Cine 9009" (o mejor dicho, en las cinco encuestas que componían el cuestionario):

1.- ¿QUÉ TIPO DE LETRA?

-- La antigua (Georgia) - 3 votos.
-- La de ahora (Lucida Grande) - 8 votos.
-- Me da igual - 2 votos.

CONCLUSIÓN: Casi dos terceras partes de los votantes encontraron que la nueva letra era mejor. Por mí estupendo.

2.- ¿TEXTO CON COLORES?

-- Era más fácil de leer cuando tenía varios colores - 2 votos.
-- Ahora está mejor, menos chillón - 8 votos.
-- Me da igual - 1 voto.

CONCLUSIÓN: La desaparición del color amarillo fue mayoritariamente bien recibida por los lectores. Menos mal, eso me da menos trabajo, un paso menos en el trabajo de edición... (sólo quedan: ver la peli, buscar la información técnica, escribir el comentario, buscar la foto, revisar los enlaces, buscar los videos y publicar. Y además de eso hacer un break para arañarle los helechos a mi ama).

3.- ¿BIEN POR LOS VIDEOS?

-- ¡Sí, sí, sí, ahora sabemos cómo es la peli! - 6 votos.
-- Me lleva, no veo videos y además carga más lento - 1 voto.
-- Hagan lo que quieran - 1 voto.

CONCLUSIÓN: En la Era Internética, ver para creer es más válido que nunca, y si una imagen vale más que mil palabras, un video tendrá que valer... vamos a ver... quién sabe. En cualquier caso, ya que me han pedido videos, videos habrá que seguir buscando (la cosa va a ser divertida cuando postee alguna de Shannon Tweed, Shannon Whirry o cualquiera otra de esas cochinonas de toda la vida...).

4.- ¿ES ÚTIL QUE AHORA INCORPOREMOS ENLACES?

-- Sí, me encanta ver otras perspectivas sobre la peli - 6 votos.
-- No, en realidad nunca los sigo - 1 voto.
-- ¿Ahora viene con enlaces...? Ni me había fijado - 0 votos.

CONCLUSIÓN: Me halagan, humanitos, me siento más feliz que con leche y paté Whiskas por delante. Son lectores despiertos, que no se quedan con lo que diga un archimandrita desde su púlpito, sino que siguen buscando más allá. Qué decir, ustedes hacen que valga la pena seguir en esto... (Porque de la porquería de ingresos netos, equivalentes a cero en cualquier moneda, ni hablar...).

5.- ¿MUCHOS POSTEOS SIMPLES O POCOS PERO MÁS COMPLETOS?

-- Muchos, aunque sean simplecitos - 2 votos.
-- Completos, aunque el ritmo de posteo disminuya un poco - 1 voto.
-- Por mí cualquiera, en tanto la calidad se mantenga - 5 votos.

CONCLUSIÓN: ¡¡¡La prueba de fuego!!! Porque claro, una cosa es pedir que los posteos ahora vengan más largos y completos, y otra cosa es el ritmo de posteo. Posteos más completos requieren más trabajo, más tiempo, y por lo tanto disminuirá sensiblemente el ritmo de los mismos. De hecho, bajó a la mitad, de cuatro pelis semanales a dos. Pero afortunadamente, mis lectores han sido comprensivos, y entienden que a cambio de enlaces, videos y todas esas cosas, hay que sacrificar un poco la cantidad (o eso, o están hartos de que General Gato les inunde el RSS con tanto material...). Además, con 438 reseñas posteadas y contando, en caso de echar de menos material nuevo tienen material clásico de sobra para consolarse... Y por paliza indiscutible 4,5-0,5 (la última pregunta podríamos considerarla como medio punto para cada opción), el nuevo formato de Cine 9009 llegó para quedarse.

Les saluda desde su confortable chimenea, mirando con olímpica displiscencia su bien lleno platito de galletas Whiskas, su seguro servidor el GENERAL GATO. (Si a tanto alcanza su cariño, envíenme de contrabando un canarito para zampármelo, la cruel de mi ama me tiene a dieta de aves porque dice que puedo atragantarme con uno de sus malditos huesos...).

martes, 9 de septiembre de 2008

ENCUESTA CINE 9009: La temporada de blockbusters 2008.

Todos sabemos que en Estados Unidos, la gran temporada de blockbusters es Mayo-Junio-Julio, y la coletilla para Agosto, principalmente porque coinciden las vacaciones de verano y las fiestas patrias del 4 de Julio. Acá quizás no tanto, porque coincide con las dos semanitas de los peques para las vacaciones de invierno australes, pero en fin, ya sabemos quién manda en el mundo (y envía el preemt strike)... Así es que le preguntamos a nuestros lectores, en el mes de Agosto: "¿Qué es lo mejor en la temporada de estrenos medioañeros del 2008?". 69 lectores (fueron 69, ¿OK?, no es un chiste "de ésos") le dieron 123 votos al listado de películas, lo que marca en promedio que cada lector encontró buenas 1,78 películas. Había también las correspondientes opciones de descarte, pero que no fueron excesivamente votadas. Aún así, restándolas al universo de 69 votantes y quedándonos con los 58 votos restantes, éstos votaron por 2,12 películas en promedio. Pero en fin, estadísticas aparte, vamos a los resultados:

36 VOTOS (52% DEL TOTAL):

-- "Batman: El caballero de la noche". El contubernio Nolan/Bale/Ledger & CIA limitada, imponiéndose por paliza.

11 VOTOS (15% DEL TOTAL):

-- "WALL-E". Merecía mejor suerte. Pero 11 votos de 69 no es despreciable.
-- "Kung Fú Panda". Las artes marciales hongkonesas a la Dreamworks, escalando por los márgenes.

10 VOTOS (14% DEL TOTAL).

-- "Hulk: El Hombre Increíble". ¡¡¡HULK MACHACARÁ...!!! Y machacó a varios otros blockbusters del verano.

9 VOTOS (13% DEL TOTAL):

-- "Iron Man". Uno de los que empezó la carrera. Y quizás se cansó rápido. Aunque se salvó de tener que competir contra la de Batman.

8 VOTOS (11% DEL TOTAL):

-- "El Príncipe Caspian". Contra toda esperanza, considerando que era más bien "para peques" y cosiacas así, obtuvo una digna votación.
-- "Hancock". Desahuciada por la crítica, pero aparentemente respetada por el público. O por un segmento del público, al menos. Siguió yéndole mejor que a otras...

6 VOTOS (8% DEL TOTAL):

-- "Meteoro". El tiempo dirá si fue adelantada para los tiempos, o una simple vía cinematográfica abortada.
-- "El fin de los tiempos". Estamos de acuerdo en que buena-buena-buena, lo que se llama buena, no era. Pero, ¿era el fiasco colosal que todos quieren describir...?

5 VOTOS (7% DEL TOTAL):

-- "Súper Agente 86". La dupla Carell-Hathaway no parece haber calentado a mucha gente...
-- "Expedientes Secretos X: Quiero creer". Se presta para el chiste fácil, y pisaré el palito: no mucha gente creyó.

4 VOTOS (5% DEL TOTAL):

-- "Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal". Después del blockbuster oficial y la expectación friki, obtuvo una votación más bien defraudante.
-- "Sex and the City". Lo asombroso no es que haya gente que vote por esta peli. Lo asombroso es que haya conseguido alcanzar en votos a la cuarta de Indiana Jones.

LAS OPCIONES RESIDUALES:

-- NO VÍ CASI NINGUNA: 7 votos (10% del total). Ustedes se lo pierden, este año estuvo mejor nutrido que otros en términos fílmicos...
-- ...Y NO VERÉ NINGUNA (¡BURGUESES!): 4 votos (5% del total). Bueno, ustedes deciden, es su dinero.

Sigan en nuestra sintonía...

domingo, 7 de septiembre de 2008

"Hellboy II: El Ejército Dorado" (2008).


-- "Hellboy II: The Golden Army". Estados Unidos / Alemania. Año 2008.
-- Dirección: Guillermo del Toro.
-- Actuación: Ron Perlman, Selma Blair, Doug Jones, James Dodd, Jeffrey Tambor, John Alexander, Luke Goss, Anna Walton, Seth MacFarlane, John Hurt, Brian Steele, Andrew Hefler, Iván Kamarás, Mike Kelly, Jeremy Zimmerman.
-- Guión: Guillermo del Toro, basado en una historia de Guillermo del Toro y Mike Mignola, basados a su vez en el personaje de Mike Mignola himself.
-- Banda Sonora: Danny Elfman.

-- "Hellboy II: El Ejército Dorado" en su sitio oficial en español.
-- "Hellboy II: El Ejército Dorado" en IMDb.
-- "Hellboy II: El Ejército Dorado" en la Wikipedia en inglés.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Muchos años atrás, en un susurroso experimento nazi de la WWII, nació una criatura... hmmmmmm... diferente. Nombre: Hellboy. Asignación: Oficina de Asuntos Paranormales (o algo así, no me pregunten y me da flojera chequear este dato en particular). Misión: Mostrarle sus feos y limados cachos a los indeseables del universo psíquico/astral/NewAge. Durante su niñez, en que era un feo cacharro rojo, su papi adoptivo le cuenta un cuento sobre aún muchos otros años atrás... Un cuento sobre enanos, elfos y otras criaturas dizqueceltas... Una historia sobre una mortífera guerra librada por un ejército de seres mecánicos llamados el Ejército Dorado. Su dueño quedó tan dolidamente impresionado con la devastación creada por tales seres, que haciendo gala de debilidad política extrema, decide pactar una tregua aunque iba ganando. Los humanos y el mundo inferior viven entonces en paz. Pero hay quien se opone a esa tregua. Un principito muy chulo manejando la espada, a quien eso de pactar con esos mugrosos muggles... perdón, humanos, le da ojeriza, así es que vamos a darles por el ya-saben-dónde. ¿Y cómo? Fácil, reuniendo los pedazos de la corona fragmentada que, una vez unida de nuevo, para asomBro y teRRor del plANeTA, cuANDO VueLVA A ESTAR UNIDA, ¡¡¡DESATARÁ TODA LA FURIA DEL EJÉRCITO DORADO SOBRE LA TIERRA!!! ¡¡¡VAMOS!!! ¡¡¡SÉ QUE SE LA SABEN, CANTEN CONMIGO!!! ¡¡¡MARCHEN!!! ¡¡¡MUERTE A LOS HUMANOS!!! Ahora, la última barrera de contención entre la Humanidad y sus verdugos son... bueno, un grupo de frikados conformados por Hellboy y su banda. Oh, crap...!

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Hellboy, el diablo macarra que se lima los cuernos y le gustan los gatos y fumarse cubanos de los buenos, tiene una larguísima trayectoria en el mundo del cómic. Creado por la mano de Mike Mignola, sus páginas han compendiado toda esa tradición que podríamos llamar de lo ominoso, eso que no tiene que ver con el terror a bichos tangibles como Drácula o Frankenstein, sino con los poderes ocultos de la naturaleza, el temor al invisible que acecha... Hellboy es así la versión americanizada y macarra de las edulcoradas y tenébricas fantasías de un Lord Dunsany o un Arthur Machen (o ya puestos, de la banda musical Lovecraft y los Wannabies del Terror). Su llegada al cine en 2004 era, por supuesto, cuestión de tiempo. El asunto funcionó bien básicamente porque estaba Guillermo del Toro en la carlinga, quien resistió toda clase de presiones imbéciles por parte de los jerifaltes de los estudios para meter detalles cretinos en la historia. "Hellboy" dividió a la platea entre los que la saludaron como una estupenda bocanada de aire fresco entre tanto cómic Marvel adaptado, y los que la repudiaron por no ser tan apegada y canónica a la historieta original. Lo de siempre, vamos. Era una peli inspirada, sin duda, pero tenía sus puntos débiles, en particular un final exageradamente largo para una trama tan bien hilada. Para "Hellboy II", Guillermo del Toro tomó notas. Aprovechó la experiencia de trabajo con mundos irreales, obtenida de rodar "El laberinto del fauno", y la volcó por entera en esta secuela. Además, los cuatro años de espera valieron la pena. Entre medio los Estudios Revolution quebraron, y parecía que la franquicia iba a quedar en el aire porque la compradora, los Estudios Columbia, la consideraban poco redituable, pero los Estudios Universal (la casa de los monstruos de toda la vida, a fin de cuentas, ¿no?) decidió darle una nueva oportunidad. Los de Columbia deben estarse dando de cabezazos contra la pared, no porque la secuela sea mejor que la original (lo es, en todo caso), sino por un motivo más importante, cual es que "Hellboy II" ha dado más dinero y reputación que la primera. Bueno, nadie dijo que rodar pelis no fuera una especie de ruleta rusa...

¿POR QUÉ VERLA?

-- Dicho en breve: "Hellboy II: El Ejército Dorado" tiene todas las virtudes cardinales de la "Hellboy" original, sin tener ninguna de sus flaquezas. El elenco sigue estando al tope de la bandera, con un Rol Perlman cada vez más cómodo como Hellboy y una Selma Blair que interpreta estupendamente la evolución de su personaje Liz Sherman. En la música tenemos ahora a un Danny Elfman que nos entrega una poderosa partitura, en la que por fin está rompiendo el cascarón en que él mismo se había sumergido de plagiar una y otra vez su magnífico soundtrack para "Batman" y "Batman regresa". El trabajo estético es todavía más preciosista que el anterior, y si bien esta vez el énfasis está puesto no en abismos esotéricos ariosóficos ni criaturas lovecraftianas, sino en el folclor y el legendario celta, el trabajo es plenamente consistente dentro del universo fílmico de ambas pelis. Y la traca final, que era el gran lastre de "Hellboy", acá está resuelta de manera mucho más corta y natural, y con una secuencia intermedia que no adelantaré, pero que realmente pone los pelos de punta (¿qué harías tú si tuvieras una clase de encuentro como ése...?).

-- Ya mencionamos a Perlman y a Blair robándose los puntos, pero el resto del elenco está más que sobradamente bien. Doug Jones compone a un Abe Sapiens que se enamora y por lo tanto sapiens no more, HAHAHÁ... El personaje de Johann Krauss (compuesto por uno que le da el cuerpo, otro que le da la voz, y vaya uno a saber quién más...) es una estupenda adición al grupo, y si bien a veces repulsa un poco tanta ectochulería de su parte, bueno, compensa más que bien la chulería de Hellboy, así es que estamos bien. Recuperar a John Hurt fue una gran idea, hacerlo en retrospectiva en vez de resucitarlo una mejor, y la escena preliminar en que aparece con Hellboy niño, lejos de desentonar o sonar forzada, es uno de los puntos más fuertes de la peli (recrear el cuento de niños con muñequitos, retrotrae a las maravillosas animaciones stop-motion setenteras del tándem Rankin/Bass, hoy injustamente olvidadas...). Por el otro lado tenemos a Luke Goss componiendo al Príncipe Nuada, un gran villano no tanto por lo poderoso que sea (aparte de ser temible en la pelea física, nunca le llegamos a tener verdadero miedo, en realidad), sino por la manera asertiva en que retrata cierto tipo de mentalidad nazistoide de "nosotros somos superiores, humanos inferiores no merecen vivir" con tanta naturalidad que parece más el lado oscuro de cada uno de nosotros, que el "mal que viene de afuera". A su lado, Anna Walton interpreta a la Princesa Nuala de manera un poco arquetípica, pero con unos manierismos que recuerdan a Emily Watson, que... hmmmmmm... Emily Watson hubiera estado impecable en el rol, pero a estas alturas ya está muy vieja (Watson:41-Walton:25), así es que estamos bien por este lado, también. Y mención aparte merecen los gatos que rodean a Hellboy, y que también actúan con notable naturalismo... ¡Alguna vez Oscar de Reparto para nosotros los gatos, caramba!

-- Grandes secuencias. El Príncipe Nuada atacando la subasta con unos bichillos nada más encantadores. Toda la secuencia en el zoco subterráneo. Las idas y venidas con el tema de mantener la clandestinidad del grupo de Hellboy. El dilema moral de Hellboy al pelear contra una criatura de Nuada en plena calle. Hellboy y Abe Sapiens cantando sus penas de amor. Y por supuesto, el inesperado encuentro de Hellboy y Liz Sherman con cierta criatura que les ofrece una terrible disyuntiva...

-- La historia es también notablemente buena, y tiene inquietantes concomitancias. Resulta que el villano no se ve a sí mismo como un villano, ni tampoco a las últimas se comporta como tal... Pero sus ideas son fascistas a más no poder. Muchas personas bienpensantes y optimistas respecto de eso que puede llamarse la "naturaleza humana" no entienden cómo de pronto surgen engendros demoníacos que genocidan gentes por millones porque sí, porque se les ocurrió que eso era lo bueno, y no hacen nada mejor que atribuírselo a una especie de "Mal Exterior", y así vamos satanizando a Hitler o Stalin como sociópatas perturbados que no son como nosotros, los buena gente que jamás haríamos cosas así... Bueno, en esta peli el villano no es especialmente sádico ni criminal, tampoco es noble ni es en realidad un "villano atormentado bueno en el fondo", sino simplemente una criatura humanoide que piensa que otras criaturas humanoides deberían morir, y hará lo que sea necesario por el cumplimiento de su retorcida idea. Punto. Escalofriante, si es que lo miran con detención.

IDEAL PARA: Ver la Solución Final de Hitler en clave de Mitología Celta, para fanáticos de Hellboy, y para quienes gustan del cine fantástico en general, por supuesto.

OTRAS PÁGINAS SOBRE "HELLBOY II: EL EJÉRCITO DORADO":

-- (Ir a la página) Comentario en Blog de Cine.
-- (Ir a la página) Otro comentario en Blog de Cine (y van...).
-- (Ir a la página) Comentario en Humo Negro.
-- (Ir a la página) Comentario en Culgan's World.
-- (Ir a la página) Comentario en Dreamsmith.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [en inglés, con subtítulos en español].



jueves, 4 de septiembre de 2008

"Hellboy" (2004)


-- "Hellboy". Estados Unidos. Año 2004.
-- Dirección: Guillermo del Toro.
-- Actuación: Ron Perlman, John Hurt, Selma Blair, Rupert Evans, Karel Roden, Jeffrey Tambor, Doug Jones, Brian Steele, Ladislav Beran, Biddy Hodson, Corey Johnson, Kevin Trainor, Brian Caspe, James Babson, Stephen Fisher.
-- Guión: Guillermo del Toro, trabajando sobre una historia de Peter Briggs y el mencionado del Toro, basados en el cómic de Mike Mignola.
-- Banda Sonora: Marco Beltrami.

-- "Hellboy" en IMDb.
-- "Hellboy" en la Wikipedia en inglés.

¿DE QUÉ SE TRATA?

¿Qué es lo que hace humano a un humano...? ¿Acaso el nacer de un útero materno? ¿Acaso no puede ser humano una criatura que ha nacido a consecuencias de un maléfico experimento nazi efectuado en Escocia, en 1944, para destruir el mundo...? Una criatura al que pronto los soldados yankis, con el sentido del humor macarra de toda la vida, llaman el chiquillo del infierno (Hellboy). Los Aliados ganan la Segunda Guerra Mundial, por supuesto, y Hellboy es recluido en una agencia dedicada al combate de las fuerzas paranormales que amenazan a nuestra sociedad y nuestro mundo (al menos, por una vez en la vida, no se trata de "nuestra amada América"... aunque casi). Existe allá afuera la leyenda urbana sobre Hellboy, y un agente de la CIA que acaba de ser reclutado, descubrirá que Hellboy en efecto existe. Y que tiene un padre putativo en la figura del científico que lo rescató en 1944, y que ahora se está muriendo de cáncer. Y que pretende a una chica piroquinética que se ha marchado de su lado. Y que tiene como amigo a un hombre pez llamado Abe Sapiens, que come huevos podridos y lee la mente por contacto. Y que persiguen a criaturas sobrenaturales como Sammael, un demonio al que cuesta una p*t* - c*ñ* matar, sólo para que después resuciten, los desgraciados... Y que los villanos de 1944 han vuelto a la carga... Y que Hellboy juega un papel clave en el futuro apocalipsis por el cual ciertas criaturas sobrenaturales de otras dimensiones astrales podrían llegar a causar el caos y la destrucción... Apuesto a que tu primer día de trabajo no fue tan movido.

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Los '90s fueron años malos para las adaptaciones fílmicas de cómics. Aparte de "Batman" y secuelas, hubo unas cuantas ("El cuervo", "Spawn"), pero en general, la generación comicfílica no había crecido tanto, y las pelis basadas en comics se avergonzaban y lo susurraban en voz bien baja: "adaptada de..." (léase "Blade", que casi nadie se acuerda es adaptación de un cómic de la Marvel, incluso anterior a "X-Men"). Todo cambió con el éxito monumental de "X-Men" y "Spiderman", y desde entonces se dio luz verde a la adaptación de los cómics de superhéroes primero, y luego de otras temáticas ("Sin City", "300", etcétera). Hay varias razones, probablemente. Una de ellas es que la generación de adolescentes 2000 (o sea, los nativos de 1980-1985) crecieron con esa formación y la hicieron su estandarte de batalla, más allá del ámbito de lo supuestamente friki, geek, nerd, etcétera, estigma con el que crecieron las generaciones anteriores. Otra, es que al ser historias para renegados sociales, los cómics se centran fuertemente en la idea del individuo solitario y superior contra el sistema que los aplasta y trata de mantener quietos, pero en definitiva esos héroes solitarios e incomprendidos son los que salvan el día y se quedan con la chica, algo que ningún nerd hasta la fecha había vivido, pero que era bonito para soñar... y llegada la Era Bush, todos pasaron a ser nerds, porque un único Poder Omnipotente, el de George W. Bush y compañía, decidió un p*** día cualquiera imponerse a toda la Humanidad porque sí, y la estética del Ubermensch, del hombre fuerte, volvió a estar a la orden del día (lo siento, pero los EMO carecen de futuro, ya week ones)... En medio de todo esto, había un hombre con una visión. Con un sueño. Un cómic en particular merecía adaptación. La historia de Hellboy, pergueñada por Mike Mignola, había cautivado al realizador Guillermo del Toro. Quien había dirigido "Blade II", y le habían ofrecido "Blade: Trinity", y la rechazó para rodar "Hellboy". El resultado es todo lo que se puede esperar cuando alguien con luces decide adaptar la historia de sus amores, y esa historia de sus amores además tiene gancho.

¿POR QUÉ VERLA?

- Partamos diciendo que, aunque no es una adaptación de ningún relato del maestro H.P.L., es la peli más lovecraftiana de cuántas se han rodado. Y miren que, entre maullido y ladridos, la serie B se ha inundado de pelis supuestamente basadas o inspiradas en el mundo de Howard Phillips Lovecraft. Mike Mignola nunca ha escondido que una de sus grandes inspiraciones para la estética y tramas de Hellboy son los Mitos de Cthulhu, y al ser esta peli una adaptación enormemente respetuosa con el material original, es lógico que sea la peli lovecraftiana de alto presupuesto por excelencia. Y es que es todo un alarde, el partir la peli haciendo una cita (supuesta, claro está) de "De Vermiis Mysteris", y seguir retratando a esos grandes dioses cósmicos más allá del umbral dimensional, en espacios paralelos, soñando y esperando regresar a la Tierra... Además de mezclar el asunto de Rasputin con los nazis y la mención expresa de que los villanos pertenecen a la Sociedad Ultima Thule... Además de la insinuación según la cual Hellboy sería, en cierto modo, una de esas grandes criaturas del otro lado, no un mero demonio, sino EL demonio por excelencia... Lo dicho, puro Lovecraft. Servidor quien esto escribe, atestigua que se le caía la baba cuando veía los tentáculos y los ojos de las criaturas rondando por el otro lado; y lo testimonia alguien que gusta de Lovecraft, pero nunca ha sido excesivamente fanático de su universo mitológico, para que vean lo impresionante que era.

- Guillermo del Toro. El director de "El laberinto del fauno" se ha estado haciendo de un nombre en el ámbito de lo fantástico. De inicios más o menos palomiteros con la no tan interesante "Mimic", escaló posiciones con "El espinazo del diablo" y "Blade II", y luego rechazó tanto "Blade: Trinity" como "Harry Potter y el Prisionero de Azkaban" para dirigir "Hellboy". Y Dios y Yogh Sototh saben lo que el pobre tuvo que soportar para realizar la peli. Porque los productores, ávidos de justificar su puesto, empezaron a tomar algunas decisiones macarras: que Hellboy tenía que ser un humano que se convirtiera en demonio cuando se enojara, que Hellboy tuviera la apariencia de un humano normal... Cretinos que nunca habían leído la historieta ni tenían idea de qué la hacía tan especial, pero que por decir flores como ésas les pagan, porque si no dicen nada, los despiden por "poco creativos"... Con ellos dan ganas de recordar aquella consigna franchuterrevolucionaria de "¡los aristócratas, al farol!". Guillermo del Toro adaptó a Hellboy como debía, y el resultado es una película redonda, a la que nada sobra y nada falta.

- Ron Perlman. Se dice que cuando Mike Mignola y Guillermo del Toro se encontraron por primera vez para conversar sobre la futura peli, acordaron decir al unísono qué actor debía encarnar al prota, y ambos a un tiempo dijeron: "¡Ron Perlman!". Por suerte para ellos, y en particular para nosotros los sufridos espectadores, Ron aceptó. Recordamos a Ron por numerosísimos papeles ("La guerra del fuego", "Los piratas del hielo", "El nombre de la rosa", el prota de la serie de TV "La bella y la bestia", "La ciudad de los niños perdidos", "La isla del Doctor Moreau", "Alien: La resurrección", "Titan A.E.", "Enemigo al acecho", "Blade II", ¡mi Dios!), pero a mi gusto personal, es Hellboy el que será para siempre su mejor y más fina interpretación. Y es que se siente muy a gusto como el demonio macarra y bueno para el cigarro, a lo mejor porque por su físico poco, ejem, "hollywoodense", siempre está condenado a papeles de bestia, de deficiente mental o de grandote, y no le había tocado ser el héroe absoluto. Aquí lo es. Y a todo lujo. Era la mejor elección. Lo demostró ampliamente. Por eso te queremos, Ron.

- El resto del elenco, conformado casi enteramente por figuras de segunda y tercera fila, está más que bien (de hecho, actúan mejor que muchos actores hollywoodenses de primera). Selma Blair compone el que es más o menos su rol de siempre, siempre tratando de mantenerse a flote desde que llamara la atención por primera vez de secundaria en pelis como "Juegos sexuales" o "Legalmente rubia". Quizás es también "Hellboy" la gran peli de Selma, en donde es la prota femenina principal, y crea una gran empatía con Ron Perlman, en una relación tortuosa, de amantes y paternofilial al mismo tiempo. El gran John Hurt, por su parte (ha hecho papeles muy variados, desde el John Profumo de "Escándalo" hasta el tipo deforme de "El hombre elefante", aunque para el fan sci-fi siempre será el tipo al que le sale el bicho de la panza en el "Alien" original, y después le pasa lo mismo en "Hay un loco suelto en el espacio")... El gran John Hurt, decíamos, compone al científico y padre putativo de Hellboy con enorme bonhomía, a veces severo y a veces querendón, y encaja de maravillas con Perlman. El resto del elenco, como decíamos, sin estar especialmente brillante, hacen interpretaciones bien ajustadas a sus cometidos, y no desentonan... NADIE DESENTONA, y eso ya es bastante.

- La historia... Pues bien... Digámoslo desde ya, no es el fuerte de esta peli. La primera mitad es poderosa, tiene gancho, acción, suspenso, emoción, romance, todo lo que convierte a una película en una experiencia inolvidable. Pero en la segunda mitad todo se hace más lineal, se transforma en la cacería del villano en su base secreta, cacería que se estira como goma de mascar, y se pierde mucho de lo ganado en términos de guión hasta el minuto. Aunque la secuencia final tiene esas famosas últimas palabras: "hey, ¿qué tan grande puede ser...?" (por descontado que cuando un macarra como Hellboy dice algo así, es MUY MUY MUY grande).

- El trabajo estético es impecable. Los nazis adictos a lo paranormal se ven como nazis adictos a lo paranormal. Los escenarios, una buena parte de ellos creados con CGI, le infunden bastante tenebrismo a la acción. La agencia de lo paranormal no se ve como sacada de una peli serie B de rebajas ni tampoco como un reducto ultratech, sino como debería verse un centro de persecusión policial de lo paranormal. El museo se ve bonito, las secuencias bajo la ciudad y en el metro también... Los personajes están también bien vestiditos, bien peinaditos... Lo intentaron bien intentado, y les resultó.

IDEAL PARA: Lovecraftianos de pura cepa, comiqueros, enamorados de los romances perdidos, e incluso, incluso, incluso, hasta los palomiteros de toda la vida.

OTRAS PÁGINAS SOBRE "HELLBOY":

-- (Ir a la página) Comentario en Cineismo.
-- (Ir a la página) Comentario en Arlequín.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [doblada al español de Ezpaña].



-- El mismo trailer de la peli [en inglés, sin subtítulos].



-- Inicio de la peli [en inglés, sin subtítulos].



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